Javier Caruda de Juanas

Javier Caruda de Juanas


De fiestas, cenas y baches

01/09/2022

Cada cierto tiempo necesitamos resetearnosa enfrascándonos en el tantálico esfuerzo de la búsqueda de la felicidad. Nos esforzamos en dejar a un lado aquello que hemos descubierto que no es de nuestro agrado y nos centramos en abrir una nueva puerta tras la que se esconde todo un prometedor futuro. Nos pasa en Año Nuevo, nos pasa la tristemente feliz tarde del Domingo de Resurrección y nos ocurre tal día como hoy, uno de septiembre, año tras año.

Acabamos de cerrar las puertas veraniegas abiertas hace un par de semanas por las que accedimos a un mundo en el que disfrutamos de un todovaleporqueestamosenverano y en nuestro horizonte vislumbramos ya la continuidad de una rutina que nos recordará, como dice Sabina, que el otoño dura lo que tarda en llegar el invierno.

También es momento de evaluar el tiempo gastado en estas tardes de helado y caballitos. Cada cual realizará su propia valoración, pero parece que necesitamos la oficial, la de nuestros munícipes, que nos cuentan que un año más las fiestas en honor a San Julián han vuelto a batir récords de asistencia al obsoleto recinto ferial, del éxito de todas las actividades lo que ha permitido a vecinos y visitantes disfrutar de un fin de agosto en el que hemos recargado las pilas.

San Julián sale por la puerta de lo hecho para que San Mateo llame a la de lo preparado presentándonos una fiesta participativa donde las haya. Más este año que, por obra y gracia del designio municipal, durará un día más.

Y mientras que preparamos el cambio de armario en lo que a fiestas locales se refiere, toma fuerza un nuevo deseo o un viejo anhelo por el que luchar en este tiempo inter días festos. El nombramiento de Cuenca como capital española de la gastronomía en 2023 es el objetivo fijado por unos y otros para situar nuestra ciudad como destino gourmet de primer orden. Para ello se ha elaborado un programa de actividades que ha colgado el cartel de completo en pocas horas, es decir, ha obtenido un éxito rotundo, aunque quizá habría que preguntarse si el perfil del participante se corresponde con quien tiene que decidir si somos capital gastronómica o no. Lo que parece que empieza a ser un proyecto capital es el de las escaleras mecánicas. Anuncia la Junta de Comunidades que espera disponer del mismo a finales de este mes. Una vez recibido será supervisado, desconocemos por quién, seguramente por alguien que entienda de escaleras. En fin, que se nos presenta un mes de septiembre con realidades, posibles y futuribles, lo cual es bueno, como también lo habría sido que se hubiese programado una de esas cenas dedicadas a promocionarnos como capital gastronómica en la acera de la Avenida República Argentina, a la altura del antiguo edificio de educación. De esta manera se podrían haber tapado los innumerables baches con los propios ladrillos que los conquenses, sabedores del precio de los mismos, hemos dejado apoyados en la pared.