La pandemia obliga a los taxistas a replantearse el servicio

I.M
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Una bajada de los clientes y de la actividad ha reducido en cinco los vehículos que circulan a diario y se estudia la posibilidad de rebajar al 50 por ciento los del sábado y los del domingo

Imagen de dos taxis aparcados en una de las paradas que hay en la capital. - Foto: Reyes Martínez

La pandemia está haciendo que los taxistas estén, al igual que otros profesionales, ‘mal’, o como se dice coloquialmente, con el ‘agua al cuello’.

Las restricciones de movimiento, los límite de ocupación del servicio de taxis, por ejemplo, al 50% con el actual nivel 3, y los cierres de otros sectores, como el de la hostelería y el del ocio nocturno, están trayendo consigo menos clientes y menos clientes suponen menos actividad y menos actividad conlleva menos servicios , según informa el presidente de la Asociación Provincial de Radio Taxi, José Antonio Toledo García.

Y si bien, en los meses del verano, en fechas concretas como el 12 de octubre o en periodos festivos, como el de Navidad, apunta Toledo, se notó, pese al Covid-19, más movimiento, hoy por hoy, «los fines de semana, que podría decirse que son los que nos salvaban el mes, están fatal y en cuanto al resto de la semana, mientras no nos cierren lo sanitario, por las mañanas hay un cierto trasiego, sobre todo, de gente mayor que va a consulta. No obstante, pese a ello, no estamos trabajando ni al 50% de lo que trabajábamos antes del virus».

Esto también, añade Toledo, ha hecho que « cada día de la semana haya cinco coches menos, simplemente porque no entraríamos todos estacionados en las paradas, mientras que de cara al fin de semana estamos estudiando la posibilidad de volver a las libranzas de lo duro de la pandemia, de dejar al 50% los taxis del sábado y la otra mitad a librar y el domingo a la inversa, es decir, los que trabajaron el día anterior descansarían y los que descansaron trabajarían e ir alternando esta situación hasta que cambie la cosa». «Nosotros, continúa explicando, habitualmente en el tren que llegaba sobre las 10 de la mañana a la estación con gente que venía a trabajar o a ver la ciudad podríamos tener entre 20 y 25 servicios diarios, en estos momentos, pueden ser uno o ninguno y después de haber pasado horas y horas en la parada».

Pese a esta situación, desde la citada Asociación se lamentan de que, quitando los ERE a los que tuvieron acceso algunos titulares con asalariados, «carecen de ayudas para paliar sus efectos», pero, insiste Toledo, «ahora no nos quedan ninguno de éstos. Yo, por ejemplo, tengo a mi hijo, por lo que, si antes podía echar todas las horas de trabajo que fuesen necesarias y me aguantase el cuerpo, ahora, a partir del mediodía descanso para que él lo lleve y de paso mi vehículo no esté parado, esté continuamente en movimiento».

Sin cambios. La ciudad de Cuenca cuenta, informa el presidente de la Asociación Provincial de Radio Taxi, con 35 licencias, con 35 titulares, a los que en las épocas de más trabajo, como podía ser el verano y los fines de semana, había que añadir, por otra parte, entre ocho y 10 asalariados más.

Las últimas licencias que sacó adelante el Ayuntamiento conquense para la prestación de este servicio fueron en coincidencia con la llegada del AVE a Cuenca hace más de 10 años, no habiendo, no obstante, desde aquel entonces movimiento alguno al respecto.

Pero es que, además, al igual que pasa con las licencias, otra cuestión que está paralizada esa es la de las tarifas y con unos precios, dice, Juan Antonio Toledo, que vienen a ser los mismos de unos cinco años acá.