Es la culminación a intensos y complejos meses de trabajo. Desde que la suspensión de los desfiles procesionales de la Semana Santa de este año comenzó a verse como una posibilidad muy factible en el horizonte, la Junta de Cofradías, lejos de quedarse cruzada de brazos, se puso manos a la obra. Ante la posibilidad de encadenar un segundo año en blanco a consecuencia de la crisis sanitaria producida por el coronavirus, la institución nazarena comenzó a desarrollar un programa de actividades alternativo con el que intentar paliar, en la medida de lo posible, el impacto de la suspensión de las procesiones en el ánimo de la comunidad semanasantera de la ciudad.
Entre esas actividades y eventos –que se llevarán a cabo siempre y cuando la evolución de la pandemia lo permita y siguiendo las restricciones sanitarias vigentes en ese momento–, destaca por encima de todas la celebración de una gran exposición homenaje a la Semana Santa de España. Cuenca será, junto a Salamanca, una de las dos sedes nacionales de esta muestra, que si todo marcha según lo previsto inicialmente, se inaugurará el próximo 25 de abril en la Catedral. En principio, estará abierta al público en torno a un mes.
Se trata de una exposición de sobresaliente envergadura y sin precedentes en la ciudad. La magna muestra recrea un desfile procesional en el que se verán representadas gran parte de las semanas santas de todo el territorio nacional, así como una pequeña parte de las semanas de Pasión de algunos países de Sudamérica e Italia. A través de un recorrido aproximado de 80 metros de longitud, el espectador podrá empaparse de una enorme cultura nazarena, comprendiendo además la manera tan particular en la que se vive la Semana Santa en diferentes puntos del país.
Como es lógico, ese imaginario cortejo procesional arrancará con un guión de cabecera, así como con estandartes, que darán paso a más de 80 maniquíes ataviados con las indumentarias propias de la Semana Santa de cada ciudad. Túnicas, capuces, capas, orfebrería cofrade y demás elementos característicos darán sentido al discurso museístico. Todas las zonas de España se verán representadas de alguna u otra manera. Desde Andalucía hasta Castilla y León, pasando por la Comunidad Valenciana o Extremadura, entre otros puntos de la geografía española. Sirva como ejemplo que uno de esos maniquíes representará a uno de los famosos empalaos, propios de la localidad cacereña de Valverde de la Vera.
Como en todo desfile procesional, habrá un paso, y en este caso se va a contar con la talla de Nuestro Padre Jesús Cautivo, dispuesta a su vez sobre las andas antiguas de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli de Cuenca. Hay que destacar que esta Imagen, que tiene la particularidad de homenajear en su integridad a todas las hermandades y cofradías del país, pertenece a la Junta Pro Semana Santa de España, con sede en Valladolid. Institución con la que la Junta de Cofradías conquense ha llegado a un acuerdo para albergar esta muestra. Sin duda, un gran esfuerzo que merecerá la pena.
Mantener viva la llama. Una de las principales razones que ha llevado a la institución nazarena a desarrollar un programa alternativo de actos para paliar la ausencia de procesiones por segundo año consecutivo es mantener viva la llama de la Pasión, especialmente entre los más jóvenes. En este sentido, además de las diferentes exposiciones que se van a llevar a cabo, en el Museo de Semana Santa trabajan ya para terminar de cincelar actividades pensadas para los más pequeños de la casa.
Así, en este momento se está preparando el tercer y último capítulo de La poética de la Semana Santa, después de los dos primeros, ya emitidos, uno dedicado a las vírgenes y otro a la procesión del Santo Entierro. Además de desarrollar este capítulo, se potenciarán los dos anteriores. Estas espectaculares proyecciones en la pantalla inmersiva del Museo conjugan a la perfección ilustraciones, poesía, música y vídeo. No será la única actividad, pues la JdC ya piensa en alguna que otra más, como pueden ser varios talleres con el mundo nazareno como gran protagonista.