La pendiente de la cuesta de enero se empina este año más de lo habitual. El regreso a la rutina diaria tras una Navidad cargada de excesos –no solo culinarios–, que varían dependiendo del fondo de cada bolsillo, supone un pequeño gran Everest para muchas familias. En este complejo contexto económico en el que la inflación sigue haciendo de las suyas y aprieta más de la cuenta, es tiempo de contracción del mercado. Al menos los dos primeros meses del año siempre lo han sido. En todos los sentidos. Para llevarlo lo mejor posible, los comercios se lanzan con sus mejores armas e ilusiones a una nueva campaña de rebajas, a pesar de que en este recién estrenado 2023 llega un poco descafeinada en materia de creación de empleo. Según los datos de Randstad, el número de contratos al calor de este periodo de descuentos descenderá casi un 30 por ciento respecto al año pasado.
Esta empresa de recursos humanos ha publicado sus previsiones de contratación teniendo en cuenta los sectores del comercio y la logística. Y, de esta forma, apunta que las rebajas generarán en Castilla-La Mancha en torno a 7.870 altas laborales, lo que supone un 26 por ciento de disminución respecto a la anterior campaña, cuando se consiguieron 10.648 contratos. De esas casi 8.000 contrataciones, 460 corresponden a la provincia de Cuenca, que ve bajar su nivel un 27,8 por ciento desde los 637 contratos que sumó en la campaña anterior. Tres de cada diez contratos que se firmaron en 2022 no se firmarán ahora, según Randstad.
Cuenca se encuentra un punto y medio porcentual por encima de la media regional (26,1%) y en unos guarismos muy similares a los de Albacete y Ciudad Real, que merman su contratación un 26,9 y un 25,3 por ciento, respectivamente. Nada que ver con los dos polos, totalmente opuestos, que son en esta materia Guadalajara y Toledo. Ésta última provincia castellano-manchega 'solo' decrecerá un 19,8 por ciento, lo que supone el porcentaje más bajo de todo el país. Por el contrario, Guadalajara presenta uno de los registros más acentuados de nuestra piel de toro, con un 30,1 por ciento de disminución.
«El clima de incertidumbre que actualmente sufrimos seguirá provocando que la reciente campaña de Navidad o la inminente de rebajas tengan resultados más moderados que las del año anterior», asegura Valentín Bote, director de Randstad Research. Aún así –añade– «podemos sacar conclusiones positivas, como las del buen estado de forma del sector logístico».
En el conjunto del país, Randstad prevé que la campaña de Rebajas generará alrededor de 140.660 contrataciones, un volumen un 24,2 por ciento inferior al año pasado, cuando se registraron cerca de 185.500 firmas. El sector del comercio será el que una mayor caída experimente durante esta campaña de Rebajas. En concreto, un descenso del 29,5 por ciento, ya que se pasará de los 68.487 contratos del año pasado a los 48.287 actuales.
Sector logístico. La logística será el sector menos afectado por la actual situación. Los perfiles que más demandarán las empresas logísticas para dar respuesta al aumento de la demanda durante esta campaña serán los de empaquetadores, carretilleros, mozos de almacén y transportistas, entre otros. A pesar del mayor descenso de la contratación en el comercio, este sector continuará precisando profesionales. Se demandarán perfiles como dependientes, promotores, azafatos y perfiles comerciales, principalmente, entre los que se valora el trato cercano con el cliente y sus dotes comunicativas.