Mercadona ha puesto en marcha en Cuenca su Estrategia 6.25, que apuesta por  la sostenibilidad y la economía circular, con un plan para reducir el 25 por ciento del plástico; convertir todos los envases de plástico que utiliza en reciclables; y reciclar todo su residuo plástico hasta 2025. El supermercado de la Avenida de San Julián de la capital conquense es el primero de este nuevo modelo de ‘supermercado verde’ que la compañía promueve en la provincia.

El proyecto permite que el establecimiento ahorre un 40 por ciento de consumo energético frente a una tienda convencional y, por tanto, sea más eficiente. De hecho, Mercadona se ha propuesto que el plan se extienda al resto de supermercados que tiene la firma en la provincia –Dos más en la capital, Motilla, San Clemente y Tarancón–.  Además de escenificar el nuevo modelo en una gran cantidad de productos que han readaptado su embalaje por materiales biodegradables y que están manufacturados a partir de material reciclado,  la cadena ha colocado distintos contenedores para la separación de residuos dentro de la tienda, así como el reparto de cartelería –en forma de imán– con información sobre el reciclaje para llevar a casa.

La estrategia ‘verde’, con las seis líneas de acción principales (Eliminar bolsas de plástico de un solo uso en todas las secciones; eliminar desechables de plástico de un solo uso; disminuir el plástico en los envases de su marca; que todos los envases sean reciclables; separación de residuos; y ayudar al cliente a separar) forma parte de las decisiones sostenibles que ya ha tomado la cadena de supermercados, como cuando en 2019 eliminó la bolsa de plástico de un solo uso en la línea de cajas y fue sustituida por bolsas reutilizables, reciclables y sostenibles: una bolsa de papel y una bolsa de plástico elaborada con plástico reciclado procedente del embalaje de las tiendas. Asimismo, el cliente dispone de la cesta de rafia, la bolsa reutilizable implantada desde hace muchos años en toda la cadena.

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Durante octubre, la empresa ha abierto una tienda piloto de estas características en todas las provincias. A partir de ahí se implantará este modelo en toda la cadena de forma progresiva. En la tienda habrá bolsas sostenibles tanto para realizar la compra (pescadería, charcutería, fruta y verdura y horno), como en la línea de cajas y en la sección Listo para Comer. Todas las bolsas incorporarán un pictograma indicativo que ayudará a clientes a depositarlas en los contenedores que corresponde para su posterior reciclaje y compostaje.