Castilla-La Mancha contará desde este mismo año con una nueva línea de ayudas de la Junta dirigida a ganaderos de ovino y caprino en extensivo, para el mantenimiento de perros mastines que les ayuden en la protección del ganado en las zonas de riesgo por la presencia de lobos.

Estas ayudas se suman a las ya existentes para indemnizar a aquellos que sufren daños en su ganado y para prevenir ataques de lobo, que llevan convocándose desde hace años en Castilla- La Mancha, según informaba este martes la delegación de la Junta en Guadalajara en una nota de prensa. Recuerdan desde la Junta que ya eliminó el límite máximo de las ayudas a la ganadería extensiva por ataques de lobo, modificación que también ha entrado en vigor este año 2023.

La directora general de Políticas Agroambientales, Silvia Nieto, y el delegado provincial de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural en Guadalajara, Santos López, se reunieron este martes con representantes de la Asociación de Ganaderos de la Sierra Norte al objeto de perfilar los últimos detalles de la línea de ayudas para la adquisición de mastines. Con ello se da respuesta a las demandas de los ganaderos de la Sierra Norte de Guadalajara, por ser ésta la zona de la región donde se ha registrado el mayor número de ataques y presencia estable de manadas de lobos en los últimos años.

Esta nueva línea de ayudas subvencionará el mantenimiento de perros mastines, históricamente aliados de los ganaderos por su instinto de guarda y protección. Se podrá tener un número suficiente de mastines para que cumplan su función de proteger al ganado frente a los posibles ataques del lobo ibérico. No serán subvencionables la adquisición de los perros ni los gastos veterinarios iniciales y de inscripción en los registros correspondientes, puesto que ya existen ayudas dentro del programa de Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha.