Durante la primera quincena de agosto se desarrolló en Francia el Festival Internacional de Música Eurochestries, en la comarca de la Charente-Maritime. Este evento cultural contó representantes de 11 países, la celebración de 60 conciertos y la participación de cerca de 350 músicos.
Cuenca se estuvo brillantemente representada por el grupo conquense Rural Band, una formación compuesta por una docena de jóvenes músicos de reconocida profesionalidad, dirigida por Pablo Martínez Valiente. Todo empezó con el concierto inaugural de apertura en la ciudad de Jonzac junto con el resto de agrupaciones, en el que interpretamos el pasodoble En er mundo, de Enrique García Asensio
Bords, La Tremblade, Saint Georges de Longuepierre e Hiersac fueron los escenarios en los que nuestra agrupación, en solitario, deleitó a los asistentes con un amplísimo repertorio de música típicamente española. Obras todas ellas que se veían ilustradas por detalles de ingenio y gracia que han hecho la delicia del público. En Saujon compartieron escenario con la Orquesta sinfónica Contrapunto, de México, donde nuestro director compartió batuta con la prestigiosa Lizzi Ceniceros. Alli, entre otros temas interpretaron un fragmento de La boda de Luis Alonso, zarzuela de G. Giménez. Este concierto se consideró por la organización como uno de «les temps forts du festival».
Rural Band encandiló al público en el Festival Internacional de Música Eurochestries - Foto: Miguel A. MartínezApoteosis conquense. Y llegaron los dos conciertos de clausura, en las ciudades de Jonzac (en su flamante palacio de Congresos) y en la ciudad de Pons (a los pies del Donjon, impresionante monumento medieval) en la región de la Nueva Aquitania, con escenarios repletos de músicos de todas las agrupaciones de manera conjunta y con unos auditorios abarrotados de oyentes.
Rural Band encandiló al público en el Festival Internacional de Música Eurochestries - Foto: Miguel A. MartínezFue aquí donde se pudo escuchar escuchar a toda la gran orquesta interpretando el precioso poema sinfónico A través del tiempo compuesto por el gran músico conquense Sergio Bascuñana Guerra y dedicado precisamente a su gran amigo Pablo Martínez Valiente que, con gran profesionalidad, dirigió la obra. Y, por si ello no fuera bastante, tras cerrar el presidente, Claude Révolte, el festival, ya fuera del programa, nuestros jóvenes músicos, saliendo de sus posiciones en la orquesta, cambiaron el chip del concierto formal por la desenfadada música de charanga que hizo sumarse al espectáculo a toda la gran orquesta y a toda la audiencia entregada en un apoteósis de ambiente festivo. Gracias a Álvaro Martínez de Lucas y Damián Jesús González León (trompetas), a Enrique Cano Zurita (tuba), a Julio Sanz Lozano (trombón), a Álvaro Saiz Bonilla e Ignacio Yunta Sequí (saxofones), a Isabel Alcázar Rodríguez y María Guerrero Mas (clarinetes), a Marcos López Fernández y Carlos Calvo Morales (percusionistas), a Sergio Bascuñana Guerra (compositor) y a Pablo Martínez Valiente (director). Rural Band se convirtió así, durante unos días, en un auténtico embajador de Cuenca.