Desde que se anunció esta semana pasada que los distintos torneos deportivos pararían al menos durante las dos semanas de confinamiento de la población, las plantillas de los clubes deportivos conquenses no han tenido más remedio que adaptar su actividad física y buscar la manera de seguir ejercitándose y no perder la forma, a la espera de la vuelta a la competición.  Se trata de que, en la medida de lo posible, los jugadores y jugadoras mantengan la forma física y puedan regresar con todas las garantías para afrontar el tramo final de sus torneos. 

En algunos de ellos, caso del Liberbank Cuenca, se juegan toda la campaña, por lo que será necesario que la plantilla vuelva a las dos competiciones que mantiene para tratar de cerrar una temporada inolvidable, por varios motivos, sin duda. 

Y es que cabe recordar que al club conquense le restan por disputar dos importantes encuentros de la fase de grupos de la EHF Cup –Holstebro y Nimes–, que aún le pueden dar el pase a los cuartos de final, y 11 encuentros de liga Asobal para lograr la ansiada cuarta plaza que le otorgaría una plaza directa en la competición continental de la próxima campaña.

Lidio Jiménez, técnico de los conquenses, reconoce que el estado de alarma «ha pillado por sorpresa a todo el mundo». Por eso, «hablamos con el preparador físico y les está mandando un trabajo individualizado a cada uno, de lo que puede hacer en casa». En función de lo que cada jugador posee en su domicilio –mancuernas, elásticos, cuerda para saltar o incluso bicicleta estática– se organizan ejercicios adaptados. 

«Ahora mismo, el trabajo consiste en mantener la fuerza y el nivel de cardio que tienen durante estas dos semanas», comenta Jiménez, que entiende que una vez que se decrete el fin de la reclusión «es conveniente hacer una minipretemporada como en invierno» o seguramente se podrían dar lesiones. 

Los jugadores tienen también unas pautas de alimentación, aunque observa el míster que «será complicado porque no todos los jugadores disponen de los alimentos necesarios. De las cuatro horas que estaban haciendo de entrenamiento van a pasar a una hora y media, que ya es bastante, y así es difícil que no se engorde». La plantilla mantiene un grupo de whastapp en el que se informa diariamente sobre los ejercicios y la dieta que deben llevar a cabo.

Sobre la competición cree que «debería suspenderse» si las restricciones fueran superiores a un mes» puesto que, entre otras razones, la mayoría de los jugadores de Asobal, caso de Liberbank, tienen contratos de 10 meses. Alargar ese periodo conllevaría un esfuerzo económico, inasumible, para los clubes. De hecho, la liga Asobal anunció este martes que las jornadas 20, 21 y 22 se aplazan hasta nueva fecha.

No obstante, reflexiona el técnico que «ahora mismo el equipo está trabajando, entrenan lo que pueden y habrá que tener paciencia».

Otros clubes. El preparador físico de la plantilla de la Unión Balompédica Conquense, Marcos de la Cruz, es el encargado de organizar al detalle las tareas de cada jugador. Un plan semanal e individualizado permitirá a los futbolistas seguir ejercitándose sin tener que salir de sus domicilios.

Lo cierto es que este parón obligatorio llega cuando el equipo estaba en plena línea ascendente que le coloca a solo dos puntos de los puestos de promoción. Dieciocho puntos de los 24 jugados en la segunda vuelta sitúan a los de Nacho Alfonso como segundo mejor equipo del campeonato. 

Tampoco se parará en el Fútbol Sala VivoCuenca, que tiene en su mano el ascenso a la Tercera División. El preparador físico del equipo capitalino  diseña un plan específico e individualizado para que los integrantes de la plantilla azulona empiecen a trabajar en sus casas a partir de la próxima semana. 

Algo parecido pasa en el San José Obrero, CB Cuenca Masculino y CB Cuenca Femenino, CR A Palos o CV Hervás, entre otros. Lo importante, coinciden los clubes en las redes sociales, es la salud de todos los deportistas y de sus familiares con los que conviven. Las competiciones deportivas ya se retomarán.