La Mancomunidad de Aguas El Girasol, de la comarca taranconera, ha dado el visto bueno -en su última sesión plenaria- a la solicitud del Gobierno regional al Ministerio de Transición Ecológica para que la Tubería de la Llanura Manchega se pueda ampliar hasta Tarancón.

«Esta conexión es necesaria para mantener y posibilitar el crecimiento industrial de Tarancón y la comarca, para la puesta en marcha de proyectos como el de la fábrica de placas de yeso, que necesitará 6.000 metros cúbicos de agua al día», confirmó ayer el presidente de El Girasol, y alcalde taranconero, José Manuel López Carrizo. En cuanto a las características de esta unión, detalló que «hay dos opciones, pero todo apunta a que se hará por la más rápida, por el itinerario actual, desde la ETAP de Saelices hasta los pozos de Rozalén del Monte, y la inversión ronda los 10 millones de euros». Tras la reciente reunión con el secretario de Estado del área, representantes de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha y la Junta, Carrizo se muestra optimista a la creación de este nuevo ramal hasta Tarancón, que también podría evitar problemas de abastecimiento de agua a futuro -actualmente no hay-, y cree que la resolución llegará en breve.

En este sentido, en el Debate del Estado de la Región el presidente de Castilla-La Mancha anunció el martes que la tubería manchega se pondrá en marcha en febrero, es decir, se abrirá el primera ramal que lleve agua desde la cabecera del Tajo hacia La Mancha, un nuevo trasvase desde el río Tajo dentro de la región.

«La tubería va a ampliarse y llegará a algunos pueblos más, como Tarancón, sin duda alguna en febrero de 2023 se va a abrir el primer ramal, que será fundamental para el desarrollo de una parte de esta tierra», explicó el martes Page.

el recibo. La Mancomunidad El Girasol también aprobó en el último pleno, dos modificaciones de crédito para hacer frente a pagos habituales, y acordó estudiar con Aqualia las tarifas para 2023. «Por convenio está puesto que tienen que subir cada año conforme al IPC, pero no hemos aceptado, vamos a negociar y proponer una subida mucho más moderada, que apenas se note en el recibo del agua», cuenta Carrizo, que alaba el «gran consenso» que existe en El Girasol, pues «todos los puntos se aprobaron por unanimidad a pesar de los diferentes signos políticos de los ayuntamientos».