El consejero explicó en una comparecencia ante la prensa que este mismo jueves se ha publicado en el Diario Oficial de la región una serie de modificaciones de este decreto, que regula el desenvolvimiento en diversos aspectos de la vida cotidiana fijando limitaciones para prevenir contagios de coronavirus. Fernández Sanz detalló que estos cambios buscan corregir "una serie de errores" incluidos en la versión inicial de la norma, y que desde su departamento "ayudaremos a potenciar el turismo de interior" relajando algunas condiciones en este sector a fin de que la región pueda atraer a visitantes de diversas partes de España.

En esto último incide el permiso para que se ocupen todas las plazas de los autobuses, el principal medio de transporte público urbano e interurbano de Castilla-La Mancha. Eso sí, con la obligación fijada por la legislación nacional de que los viajeros utilicen mascarilla en su interior. En cuanto al transporte privado, se permite la ocupación de todas las plazas en coches. Si el conductor y los viajeros del turismo conviven en un mismo entorno, no estarán obligados a usar mascarilla.

También se da un espaldarazo a las casas rurales al permitir la ocupación de todas sus plazas.

Las terrazas de locales nocturnos y los comercios se podrán ocupar al 100 por 100, y vuelve el turismo de congresos.

Otra flexibilización que incide en las empresas de hostelería es que los locales de ocio nocturno podrán permitir la ocupación de sus terrazas al 100 por 100, si bien en su interior el aforo seguirá limitado al 75 por ciento.

Además, se permite la reanudación de un segmento de actividad determinante para la hostelería regional como es el turismo de congresos y conferencias. Estos eventos y reuniones de carácter profesional pueden volver a celebrarse, si bien se fija un límite de aforo en auditorios y otros espacios que los alberguen del 75 por ciento.

También se permite la apertura de jardines y zonas verdes municipales "manteniendo las medidas de prevención" frente al coronavirus. Además, se elimina toda limitación de aforo en los comercios. Esto último incluye también a los de los centros comerciales, si bien en sus zonas comunes como baños se mantiene el límite de ocupación del 75 por ciento.