Si hay algo que tiene claro la nueva responsable provincial de Tráfico es que está dispuesta a repetir las veces que sea y de manera «machacona» el mensaje de que hay que reducir las cifras de siniestralidad en las carreteras. Ana María Zúñiga (Granada, 1986) lleva año y medio en Cuenca. Tras sacar su plaza en 2020 en las oposiciones a la Escala Superior de Técnico de Tráfico en la DGT, en marzo 2021 se incorporó como subjefa a la Jefatura Provincial de Tráfico. 

Tiene entre ceja y ceja hacer todo lo posible para mejorar la seguridad vial porque como admite en esta entrevista es «muy consciente de las consecuencias que tiene un accidente de tráfico». La forma de movilidad ha cambiado, las carreteras y calles son espacios compartidos de conductores y peatones, de ahí que insista en algo tan fácil pero a a la vez tan complicado «de extremar la precaución y cumplir con las normas».

Acaba de tomar las riendas como nueva responsable de la Jefatura Provincial de Tráfico de Tráfico. ¿Cuáles son los objetivos que se marca y las líneas a seguir?

En primer lugar, dedicarme a gestionar el correcto funcionamiento de la Jefatura en el sentido del soporte que damos a los ciudadanos en la gestión de tramitación de vehículos y para los conductores, que tengan disponibilidad de cita previa y que se reduzcan los tiempos de espera para ser atendido, etc. Tenemos que tener en cuenta que desde marzo del año pasado tenemos también atención sin cita previa para personas de 65 años o más. Además, la gestión de exámenes y dar respuesta a la necesidad de examinarse de los ciudadanos de la provincia. Eso es en lo que respecta a la operativa diaria, pero después de la pandemia y viendo la cifra de siniestralidad, con la tendencia negativa que vemos en Cuenca, mi objetivo es dar un impulso a la seguridad vial.

¿La seguridad vial le quita el sueño?

Sí, si le digo la verdad, a veces sí. Soy técnico de Tráfico, dejé mi otro trabajo para opositar específicamente a la Dirección General de Tráfico. Tengo un compromiso con la seguridad vial. Por experiencias que todos tenemos de familiares y amigos que tengo una conciencia muy fuerte con la importancia que tiene la seguridad vial. Y sobre todo, porque soy consciente de las consecuencias de un accidente de tráfico.

Estamos lejos delograr las víctimas cero en las carreteras y el año pasado en la provincia de Cuenca se contabilizó una veintena de víctimas mortales. Son muchas, no?

Los datos se han cerrado recientemente. Nosotros siempre remitimos los datos a 24 horas hasta que por fin se cierra el año, cruzando los registros con las bases de datos del Instituto Nacional de Estadística. Lamentablemente 2021 se cerró con 27 fallecidos en 26 accidentes. Es el segundo peor dato de la serie histórica desde 2008, sólo superados en 2013 con 30 fallecidos. A nivel global sí que es verdad que se ha producido un descenso.

La DGT acaba de presentar su Balance de Seguridad de 2021 y constata un descenso de fallecidos en las ciudades. ¿Tiene mucho que ver la implantación de la Velocidad 30?

La Velocidad 30 en las calles lo que intenta  es que el espacio urbano sea compartido por distintos tipos de usuarios como peatones, ciclistas o vehículos de movilidad personal.Antes se tenía la concepción de que las calles eran para los vehículos de motor, que eran los reyes, pero ahora tenemos que ser conscientes de que ese espacio es compartido y queremos fomentar medios de movilidad alternativos. 

Los cambios en la movilidad obligan a legislar. ¿Es fácil que en una ciudad como Cuenca convivan coches, motos, bicis, patinetes...?

Con la reducción de la velocidad no es lo mismo un accidente a 30 kilómetros por hora que a 50. El ideal es que se compartieran espacios con otros usuario con las bicicletas como en un carril bici, pero entendemos que requiere inversiones importantes.  La DGT está trabajando para modificar el reglamento de circulación para determinar claramente cuáles son las normas de comportamiento y de circulación de este tipo de usuarios.

Las campañas de la DGT son muy duras y  en la de este verano se atropellaba al actor Eduard Fernández y a la cantante Amaia. ¿Las comparte ?

Las comparto totalmente. Tenemos que ser conscientes los ciudadanos del riesgo que supone ponerse al volante. Pienso en Cuenca, mi provincia, y es que más del 60 por ciento de los fallecidos este año ha sido por distracciones. Son comportamientos que son evitables y hay que corregir. Sólo si entendemos a lo que puede llevar coger el móvil, a tocar la pantalla, a consumir alcohol... se cambiará de comportamiento.

Habla de distracciones. ¿Puede entender que haya aún conductores que no se ponen el cinturón de seguridad?

Creíamos desde la DGT que era una batalla que íbamos ganando, pero es verdad que en los últimos años se ha producido un aumento de fallecidos que no llevaban cinturón de seguridad. Este tipo de comportamientos, como el uso del cinturón,  si se aprenden desde el colegio y vamos reforzando el conocimiento a lo largo de todas las etapas de la vida podremos modificarlos. El cinturón de seguridad, en caso de accidente reduce hasta en 75 por ciento la posibilidad de que ese siniestro sea mortal.

Los coches tienen más sistemas de seguridad, hay más infraestructuras pero las cifras de siniestralidad son alarmantes. ¿Cómo se explica?

Las distracciones, el comportamiento de los conductores, la velocidad... Si miramos la curva nacional de fallecidos, en los años noventa estaba en casi 9.000 al año y ahora estamos en 1.076.Sí que ha habido una reducción muy notable, y nos ayudan infraestructuras y vehículos más seguros, pero si el comportamiento humano no cambia los accidentes seguirán ocurriendo.

Una de las críticas recurrentes de los conductores tiene que ver con el afán recaudatorio de las multas. Supongo que no lo comparte...

No lo comparto porque en mi experiencia en la Jefatura, sobre todo con el radar, nunca me han preguntado donde creo que vamos a poner más multas o recaudar más. Lo que nos preguntan cuando se establece la ubicación de los desde la Subdirección General de Movilidad es que determinemos los puntos de conflictividad, datos de siniestralidad. Estando dentro de la DGT no veo ese afán recaudatorio.

Hablaba antes de la importancia que tiene aprender seguridad vial desde niños. ¿Sería necesaria la educación vial en los colegios?

Sí. De hecho la nueva Ley de Tráfico la introduce de una manera más concreta. Desde la DGT están preparando materiales para los centros educativos y nuestro coordinador de educación vial está trabajando con ellos. Entendemos que los centros educativos se encuentran con este nuevo reto y hay que apoyarlo e implantarlo. La educación vial es esencial y todo lo que asumimos desde pequeños como valores los tenemos cuando somos adultos. 

En Cuenca tenemos el aula de seguridad vial en el parque de San Ana y una pista. Hay un proyecto para su reapertura...

Sí, hay un proyecto. Aunque no me corresponde a mí dar datos. Pero por lo que entendido hablando con la  Subdelegación del Gobierno, que a  su vez está en contacto con el  Ayuntamiento de Cuenca, tiene muy buena pinta y que la idea es que muy pronto lo tengamos disponible. Desde la Jefatura era un asunto que Jacinto Vicente, anterior jefe provincial, quería sacar adelante.Así que por mi parte habrá toda la colaboración y el apoyo para que ese parque infantil de tráfico se use.

¿Son suficientes cinco examinadores de autoescuelas para la demanda de una provincia como Cuenca?

Tenemos  cinco examinadores en plantilla y una examinadora interina, que está con nosotros seis meses. Ypuntualmente tenemos hasta principios de octubre, durante un mes,  una examinadora itinerante que nos la mandan en previsión del pico de exámenes que se produce en el verano.Ahora estamos dando salida a todas las pruebas. Todo esto puede ir cambiando en función de la necesidad de los ciudadanos. Hablando con las autoescuelas tratamos de organizarnos de la mejor manera posible. Muchas veces, cuando hay un pico de demanda, siempre intentamos asumir los funcionarios administrativos el examen  teórico para liberar al máximo a los examinadores y que se centren en la labor que sólo ellos pueden realizar.

¿Se atrevería a poner una nota a los conductores conquenses?

Si le digo la verdad, no. Porque muchas de las infracciones no sólo son de ciudadanos conquenses que residen aquí. La A-3 tiene mucho tráfico de paso entre comunidades. Poner una nota sería una visión un poco parcial.Sí que le digo, que a nivel general, tenemos mucho que mejorar.

¿Qué consejo daría a los conductores, peatones y, en definitiva, a todos los que transitan por calles y carreteras?

A todos, a conductores, motoristas, clistas, peatones, etc. les diría que extremen las medidas de precaución, que no se confíen y que las normas de circulación no son algo baladí ni aleatorio, que están ahí por algo en base a estudios que demuestran que si las seguimos reducimos el riesgo de que nos pase algo.