La próxima cita con las urnas será dentro poco más de dos meses y medio, el 28 de mayo, y hasta ese momento la Oficina del Censo Electoral (OCE), dependiente del Instituto Nacional de Estadística (INE), trabaja de manera incesante para garantizar que las elecciones municipales y autonómicas se desarrollen de manera limpia y según marca la Ley. 

Con este objetivo, la OCE publica mensualmente una relación de entidades locales que registran un incremento de electores «significativo y no justificado» en su censo electoral, lo que pone en marcha toda la maquinaria administrativa para comprobar que esos movimientos poblacionales son legítimos y no tienen detrás ninguna finalidad electoralista o partidista.

Dos de Cuenca. La relación de estos municipios correspondiente al mes de marzo incluye un total de 40 localidades de nueve provincias de nuestro país, entre las que se encuentra Cuenca.

Y es que esta oficina del INE ha puesto el foco en los censos electorales de los municipios conquenses de Santa María de los Llanos y Villarta. Los cambios experimentados a finales del pasado año y comunicados a la Junta Electoral Central (JEC) han hecho saltar las alarmas de este organismo de control.

Eso sí, antes de la citada comunicación a la JEC,  la Delegación Provincial de la Oficina del Centro Electoral ha solicitado a ambos ayuntamientos que comprueben la residencia real de los empadronados, para lo que tienen un plazo de 15 días, ampliable por otros 15 más todas las comunicaciones intermedias, tal y como ha precisado el INE a esta redacción.

En el caso de la localidad de Villarta, el censo electoral se ha incrementado en 17 personas en los últimos seis meses, pasando de los 600 de septiembre a los 617 de febrero, mientras que en Santa María de los Llanos el aumento experimentado en este mismo periodo ha sido de 13, pasando de 571 electores a los actuales 584.