Es una de las principales reivindicaciones del movimiento feminista que tan en boga está ahora mismo. Entre las muchas metas que se plantea conseguir se encuentra la equiparación laboral entre hombres y mujeres a todos los niveles. Cuestionan el actual sistema apoyándose en la desigualdad de oportunidades y condiciones laborales. Y, sobre el papel, hay un dato que les otorga empíricamente la razón, y es que el desempleo femenino es mayor que el masculino. Cuenca no es ajena a esa tendencia estandarizada a nivel nacional, y es que según los últimos datos del paro, seis de cada diez conquenses que se encuentran sin empleo son mujeres.

De los 12.992 desempleados que actualmente cuenta la provincia, ellas suman 7.813, es decir, un 60,1 por ciento. Esta estadística permite ver, dentro de lo negativo, el vaso medio lleno o medio vacío. En primer lugar, se puede ver medio lleno al comparar las cifras de Cuenca con las del resto de provincias de Castilla-La Mancha. En lo que a esto respecta, la tasa de desempleo femenino en territorio conquense es la segunda más pequeña de la región. Solo Guadalajara mejora –y por un margen muy estrecho– el registro. En la provincia alcarreña el porcentaje se sitúa en el 59,8. Por encima de estas dos provincias, y además con algunos cuerpos de ventaja se encuentran Ciudad Real, Toledo y Albacete. Estos tres territorios rondan una estadística de paro femenino cercana al 64 por ciento. En la primera, el 63,8% de los demandantes de empleo son mujeres; en la segunda el 64 por ciento; y en la tercera el 64,3%.

Con estos datos sobre la mesa, la media castellano-manchega se aloja en el 63,3 por ciento. Y así pues, Cuenca se posiciona más de tres puntos porcentuales (-3,2%) por debajo de esa cantidad. 

Ahora bien, en segundo lugar, el vaso también se puede ver medio vacío si la comparativa no se plantea a nivel regional, sino estatal. En este sentido, tanto Cuenca como Castilla-La Mancha se ven perjudicadas. Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, en España hay 3.253.853 personas sin empleo, de las que 1.896.873 son mujeres. Esa cantidad, en términos relativos, se traduce en el 58,3 por ciento. O lo que es lo mismo, casi dos puntos por debajo de la estadística conquense (-1,8%). 

Menos paro juvenil. Desglosadas las cifras por edades, se observa una llamativa singularidad. A diferencia de lo que ocurre en la estadística general, si solamente se tiene en cuenta el desempleo entre los menores de 25 años, se observa que la incidencia del paro femenino es mucho menor. En concreto, entre una cifra y otra hay más de 12 puntos porcentuales de diferencia. Dentro de este rango de edad hay 1.195 parados en territorio conquense. De estos, 625 son hombres y 570 mujeres (el 47,7 por ciento). Así pues, el número de parados varones entre los jóvenes es sensiblemente mayor. A nivel regional esta tendencia también se observa en Guadalajara y Toledo, pero no así en Albacete y Ciudad Real. En clave nacional también se registra esta tesitura, pues de los 254.240 jóvenes que ahora mismo se afanan en la búsqueda de empleo, 131.085 son hombres y 123.155 mujeres.

La cosa cambia drásticamente si se tienen en cuenta el resto de edades, es decir, los parados mayores de 25 años. En este caso el número de mujeres sin trabajo es incluso superior que la cifra general, pues suponen el 61,4 por ciento de la cantidad total. En términos absolutos, de las 11.797 personas que se circunscriben a este estrato, 7.243 son féminas y 4.554 varones. Nuevamente, la provincia conquense vuelve a estar por debajo de la cifra regional, que en este aspecto se encuentra en el 64,7 por ciento; y por encima de la media nacional (59,1 por ciento).