CnU 'pega un volantazo' y apoya el Presupuesto del PSOE

Leo Cortijo
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El grupo independiente condiciona su voto a que la asociación Adevida reciba de nuevo la subvención de 10.000 euros, lo que agita un debate hasta entonces previsible y marcado por las críticas generalizadas de la oposición.

El equipo de Gobierno y Cuenca nos Une sacaron adelante con su voto a favor las cuentas municipales de este ejercicio. - Foto: Reyes Martínez

Los plenos del Ayuntamiento de Cuenca hay que seguirlos hasta el último instante. Como suele ocurrir con el Real Madrid en materia futbolística, hasta que el árbitro no pita el final, absolutamente todo puede pasar. Mientras hay vida, hay esperanza de saborear emociones fuertes. Y no es porque las bancadas las ocupen los Modric, Benzema, Vinicius y compañía. Sí, lo sé, el esfuerzo y sacrificio que exige hacerlo es titánico y no cualquiera aguanta durante tanto tiempo la –en muchas ocasiones– deficitaria oratoria de los parlamentarios. Es un trago, la verdad. Pero puede pasar lo que pasó en el Pleno de Presupuestos, y es que una formación que se había movido en la abstención durante el debate de las cuentas, siguiendo el papel que ya había demostrado en comisión, pegue un volantazo de última hora y pase del semáforo ámbar al verde. 

¿A cuento de qué cambió su postura Cuenca nos Une en menos de lo que dura un pestañeo? En algo tan aparentemente sencillo como conseguir el compromiso del equipo de Gobierno de recuperar la subvención para la asociación Adevida. Un apartado que como reconoció el propio líder de la agrupación independiente, Isidoro Gómez Cavero, se le ocurrió en el propio transcurso del Pleno cuando salió a colación el asunto. Y no fue un tema menor, que diría aquel, pues generó una confrontación muy enconada en las postrimerías de la sesión, especialmente cuando el popular José Manuel Cañizares afirmó que Gómez Cavero había sido el culpable en su momento de que ese colectivo perdiera la asignación, a lo que éste último contestó con un «eso no me lo dices en la calle». Y hasta la calle, precisamente, se llevaron algunos ediles el furibundo debate en una triste imagen.

Hasta ese inesperado giro de timón todo había transcurrido dentro de una más que previsible normalidad. El equipo de Gobierno, en boca del concejal de Hacienda, Juan Manuel Martínez Melero, defendiendo la naturaleza equilibrada, coherente y trabajada de las cuentas municipales; gran parte de la oposición criticando con dureza las mismas y Cuenca nos Une justificando –hasta el cambio– su abstención en la necesidad de no enturbiar la aprobación. Fuera como fuese, al final el Presupuesto salió adelante gracias a los dos grupos mayoritarios de la corporación, dejando en intentos baldíos las enmiendas y los reproches de PP, Ciudadanos y Cuenca, en Marcha!

Unos Presupuestos cuyas cifras globales, incluyendo los organismos autónomos, ascienden hasta los 56,8 millones –900.000 euros más que en el ejercicio anterior– y que suponen el tercer visto bueno en tres ejercicios consecutivos para el Ejecutivo que capitanea Darío Dolz. Circunstancia ésta, por cierto, que el alma máter de los mismos, Martínez Melero, valoró sobremanera: «Eso desmonta los malos vaticinios y los malos augurios» y que, además, «vamos cumpliendo». El responsable de Hacienda valoró el aumento en el capítulo de inversiones, con una partida presupuestada superior a los 23 millones gracias a los remanentes de ejercicios anteriores, así como algunas modificaciones presupuestarias ya aprobadas. Y, lo que todavía es más importante, una considerable reducción de la deuda municipal que alcanzaría al cierre de 2022 los 16,9 millones, lo que invita a pensar en que el Ministerio levante, al menos en parte, las cadenas del Plan de Ajuste.

Posiciones enfrentadas. El más contundente a la hora de defender su argumentario fue el portavoz popular, José Ángel Gómez Buendía, que evidenció su «decepción» al ver que, tras ocho meses de retraso en la presentación de los Presupuestos, «no se recoge nada que permita ser optimistas en el presente y futuro de nuestra ciudad», lo que demuestra que «la confluencia de color político en todas las instituciones ha fracasado». Así, acusó al equipo de Gobierno de llevar tres años «con el piloto automático encendido» y que estos Presupuestos son «de copia y pega» y no generan «ni ilusión ni prosperidad».

Gómez Buendía criticó especialmente la actitud de Cuenca nos Une al ofrecer una «autopista» al PSOE para sacar adelante sus números, lo que le llevó a preguntar al máximo responsable de esta formación si iba a seguir siendo «cómplice» de la «incapacidad» del equipo socialista. Con mucha sorna, comentó que «hay que hablar con el empresario de la plaza de toros para que en la próxima feria meta a Dolz y Cavero porque es un buen cartel de recortadores».

Cuenca nos Une justificó su visto bueno a las cuentas para no entorpecer el funcionamiento del Consistorio, a pesar de que éstas no fueran negociadas con los grupos de la oposición, circunstancia que ésta le recriminó en bloque. «Lo fácil sería votarlos en contra y justificaciones tenemos, un poco de humildad no les vendría mal, pero eso significaría atar las manos al equipo de Gobierno y aunque igual éste se lo merece, Cuenca y sus ciudadanos no», señaló Marta Tirado. Una aprobación, eso sí, que nace de «pedir y esperar», entre otros asuntos, que se materialice el Plan de Sostenibilidad Turística, los remontes mecánicos o la modernización de Carretetía aprobada recientemente.

Apoyando la postura defendida por su portavoz, Gómez Cavero, recalcó que «más vale tarde que nunca», y aunque avisó de que no iban a poner trabas, se dirigió al alcalde directamente para decirle que «no estaría de más» antes de ponerse a elaborar un presupuesto que se consulte al resto de grupos. «Aplíquese el cuento para hacer las cosas, como mínimo, básicas», afirmó. Un guante que Martínez Melero recogió para despacharlo con la justificación de que eso ya se intentó en anteriores ejercicios sin demasiado éxito, porque se utilizó no para contribuir, «sino para lo contrario» y porque además «con quien hay que negociarlos es con el Ministerio».

«Continuismo y resignación». La responsable de Cuenca, en Marcha!, María Ángeles García, calificó las cuentas de «continuistas», y no solo en lo económico, sino también en «las carencias de mantenimiento urbano, deportes, servicio de aguas y un largo etcétera». Algo que a su juicio no se puede achacar a la herencia recibida, pues «después de tres años gobernando canta más». Tanto es así que la portavoz de la confluencia Podemos-Equo observó «resignación» en los encargados de manejar los mandos de la nave, especialmente desde la pandemia en adelante. Visto lo visto, sentenció, «no parece que el equipo de Gobierno tenga mucho interés en revalidar su mandato».

Hay que destacar que Cristina Fuentes, una vez que se debatió sin éxito su enmienda, tuvo que ausentarse del Pleno por cuestiones profesionales y que, por tanto, Ciudadanos no pudo formar parte del debate en sí de los Presupuestos ni tampoco de la votación final.