No conocen la derrota, no han encajado un solo tanto en 540 minutos de partido y suman ya la friolera de 34 goles conseguidos en estos seis encuentros disputados. Son los números estratosféricos de la hasta ahora campaña inmaculada de un Conquense Femenino que está confeccionado para dar el salto y, este año sí, subir a la Primera Nacional. 

El entrenador Iván Mateo dirige por tercera vez a este conjunto joven que esta llamado a marcar un antes y un después en el fútbol femenino conquense. El míster cree que buena parte de culpa la tiene mantener el bloque de los últimos años y reforzarlo con nuevas futbolistas que rebosan calidad. No queda ahí, puesto que a las cualidades de las jugadoras se suman los tres años de trabajo conjunto y el buen ambiente que impera.  

Goleadoras. Todas las jugadoras están enchufadas y dispuestas a materializar todo lo que crea el equipo. No en vano Isabel Panadero y María Pradel ya acumulan cinco tantos y Marina Soriano lleva cuatro. 

En ese sentido, Mateo reconoce que la plantilla «no tiene ni titulares ni suplentes. Sale un 11 en cada partido y los cambios aportan e incluso suben el nivel. Cada partido es diferente y planteamos un equipo con el tipo de jugadoras que pueden hacerle más daño al rival. Si necesitamos más velocidad o tener más el balón». 

El CD iSport de Albacete y el CD Alba Fundación Femenino C siguen la estela, muy de cerca, del Conquense Femenino. Esos son, a priori, los rivales más fuertes, aunque Mateo cree que el Unión Tomelloso tiene mucho que decir en esta competición. Las blanquinegras ya han ganado a domicilio al iSport y a Tomelloso, pero resta conocer al Alba C que «para mí es el rival, porque es un equipo de chicas jóvenes, de buena cantera, que tienen mucha calidad», comenta el entrenador, que recalca que «hay que respetar a todos los rivales, pero si nosotras hacemos las cosas bien no tenemos porqué tener problemas».

Solo cabe quedar primero en el grupo 1 para acceder a las semifinales de los play-off por el ascenso que disputarán los líderes de los tres grupos de la categoría y el segundo que tenga mejor coeficiente. «La intención es ser campeonas de liga. Ese es el objetivo y para eso tenemos que ir fuertes en cada jornada», indica Mateo.

Confiesa el míster estar encantado con la marcha de un equipo «con ganas» y muestra su ilusión «por ayudar al fútbol femenino de Cuenca capital y que exista un equipo en divisiones más altas. Creo que hay nivel para poder conseguirlo». Recuerda, en este punto, que el año pasado se estuvo a punto de conseguir, pero fueron eliminadas en el play-off. «Tenemos esa espinita clavada este año, así que vamos a intentar optar a ello y lucharlo. Luego es fútbol y puede pasar cualquier cosa».

Asimismo, el buen momento es una clara muestra de que el fútbol femenino conquense está creciendo en los últimos años, una oportunidad para subir de categoría y tratar de enganchar a un público que se suma cada vez más a los partidos. «Si los resultados nos acompañan y el equipo está arriba, la gente se va a animar. Una ciudad como Cuenca puede tener un equipo en Primera División», predice el técnico.