Oleadas de solidaridad

Manu Reina
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Cáritas ayudó a 4.032 personas en 2021 con una inversión de más de dos millones y medio de euros y el esfuerzo de 260 voluntarios

Oleadas de solidaridad - Foto: Reyes Martínez

Un total de 4.032 personas se beneficiaron el año pasado de la generosidad y ayuda de Cáritas Diocesana de Cuenca. La institución humanitaria llevó a cabo un incansable ejercicio durante los doces meses, que supusieron una inversión de 2.545.328 euros para diferentes acciones a favor de las personas más desfavorecidas. Estos meses fueron además un rotundo éxito gracias, en gran medida, a los 260 voluntarios -222 en Cáritas parroquiales y 38 en programas o proyectos-, que suponen «la columna vertebral» de la institución, tal y como expuso ayer el presidente de Cáritas Diocesana de Cuenca, Pedro Bordallo, durante la presentación de los datos y resultados del ejercicio de 2021. En el acto también estuvieron presentes la secretaria general, Paz Ramírez, y el delegado episcopal, José María Alcázar. 

Bordallo, contento por los resultados obtenidos, recordó que durante el primer semestre de 2021 no se pudo realizar acciones con normalidad porque todavía existían restricciones sanitarias. El presidente agradeció no sólo el esfuerzo de los voluntarios, que son el eje principal de la institución, sino también de los sacerdotes de los barrios y municipios. Además, concretó que de las 4.032 personas que se beneficiaron directamente de las ayudas se puede traducir realmente en 14.500 ciudadanos alcanzadas, si se tiene en cuenta que cada beneficiario dispone de más miembros en su familia. «Desde Cáritas realizamos un seguimiento durante las 24 horas del día para atender, cuidar y también sufrir con ellas», expone Bordallo. 

acciones. Desde el área de acción en el territorio, Cáritas Cuenca, junto con las Cáritas Parroquiales de la provincia, acompañaron durante el año pasado a 2.485 personas con el objetivo de lograr su autonomía. Por su parte, con el objetivo de que las personas consigan un trabajo digno, en Economía Solidaria, se atendieron a 695 personas, de las que 153 encontraron trabajo y 169 realizaron alguno de los nueve cursos formativos que ofreció la entidad.

Sin olvidar la grave situación de desventaja social que atraviesan las personas en situación de sin hogar, desde Cáritas, se trabajó con más de 600 personas a través del área de inclusión social. En concreto, desde el centro de alojamiento de Urgencia, se acompañaron a 451 personas ofreciendo más de 12.000 servicios. En cuanto al proyecto de calle con Corazón, financiado con fondos propios y dirigido a trabajar junto a las personas que se encuentran viviendo en la calle o en infraviviendas, se atendieron a 84 personas.

En el área de mayores, la organización humanitaria estuvo al lado de 259 personas, destacando el proyecto de servicio de comidas a domicilio, donde diariamente reciben en torno a 90 personas mayores y/o dependientes la comida en sus domicilios, sumado al acompañamiento de un técnico. Cáritas Diocesana de Cuenca no olvida las consecuencias de las desigualdades sociales en otros países del mundo como Congo, Benín, Perú o Palestina, donde desarrolló también proyectos de Cooperación Internacional o Ayuda Humanitaria.

Este trabajo ha sido posible gracias a la labor de los 260 voluntarios y trabajadores de la Organización que, como siempre suele ser habitual, «están cerca de las personas en los momentos de mayor dificultad, haciendo referencia a esa expresión de amor que es la Iglesia», subraya Bordallo. Destaca el aumento de los recursos destinados al programa de acción social, con un incremento de la inversión dirigida a empleo y formación, cooperación internacional y acompañamiento a las familias. «Este trabajo ha sido posible gracias a las comunidades parroquiales y a la solidaridad de los conquenses», señala Bordallo.

acciones. Cáritas Diocesana de Cuenca presentó ayer la campaña que celebrará el próximo día del Corpus Christi. Este año lleva por lema Somos lo que damos. Somos Amor. Con este mensaje, la organización pretende recordar que el amor, tanto el que recibimos como el que damos y el que somos, es lo que celebramos en esta gran fiesta del Corpus. «De esta forma podemos alumbrar esperanza a pesar de los tiempos tan convulsos en los que nos encontramos», aseguraron Bordallo y Alcázar. 

Por su parte, los responsables de la Institución reconocieron la gratitud de las personas que contribuyen con su tiempo, trabajo y dedicación a la labor de Cáritas, destacando la encomiable labor de los sacerdotes de la provincia que «siempre están cerca de las personas que atraviesan una situación de dificultad», exclamaron. Además, en el acto de presentación de resultados de 2021 se agradeció a los socios, donantes y empresas que colaboran con aportaciones económicas y que, gracias a esa solidaridad, «podemos transformar en acciones de esperanza y amor hacia los demás», manifestó Bordallo.

Cabe recordar que mañana instalara la organización una mesa de cuestación en Carretería con un horario de diez a dos de la tarde. El objetivo es sensibilizar a la población sobre la acción que desarrolla. Por otro lado, Cáritas Diocesana de Cuenca invita a todos los fieles de la provincia a participar en la Eucaristía de la Catedral de Cuenca que tendrá lugar el domingo a las cinco de la tarde. La misa estará presidida por el Obispo de la Diócesis, José María Yanguas Sanz.