La red de Senderos de Cuenca que impulsa la Diputación Provincial cuenta desde esta semana con un nuevo pequeño recorrido  que llevará el nombre de la Mora Encantada y que, precisamente, discurre por los alrededores de la mina de lapis specularis de Torrejoncillo del Rey. El PR-CU 119, cuya ficha se puede consultar en la página senderosdecuenca.org y está homologado por la Federación de Deportes de Montaña de Castilla-La Mancha, tiene una distancia de 9,5 kilómetros y discurre entre Torrejoncillo y Horcajada de la Torre, y en buena parte por el margen derecho del río Gigüela. 

Como colofón de esta senda de pequeño recorrido espera la visita a la mina romana de La Mora Encantada, el yacimiento de espejuelo o lapis specularis que explotaron los romanos durante el primer siglo y que fue empleado para cubrir ventanas y vidrieras. 

La ruta de dificultad media, que se inauguró oficialmente este pasado viernes, cuenta con señalización y cartelería a lo largo de todo el recorrido. De hecho, los arqueólogos encargados de la puesta en valor del conjunto de galerías subterráneas de La Mora Encantada detallan que se han instalado nuevos paneles temáticos sobre la mina, en el edificio de acceso a la misma, para que todos los que realicen el recorrido conozcan al detalle los que supuso el llamado Cristal de Hispania para el desarrollo de la villa romana de Segóbriga y la importancia que tuvo en todo el Imperio Romano. 

 Los senderistas que deseen completar la ruta con una visita pueden solicitar una cita previa en los teléfonos 669718762 y 969278007 para visitar este singular enclave catalogado como Lugar de Interés Geológico (LIG).

«Ya solo resta que estas iniciativas de puesta en valor y la nueva ruta de senderismo de La Mora sirvan para que este bien patrimonial pueda visitarse con un horario establecido y una norma definida y pública», comenta el arqueólogo Juan Carlos Guisado, que subraya que es un recurso patrimonial, de una gran demanda turística y pendiente de una serie de iniciativas, que puede convertirse en un medio «importante y clave» para el futuro de la localidad.

La musealización de la mina fue posible gracias al Plan de Mejora de las Infraestructuras Turísticas (Plamit) que impulsó en 2011 la Diputación Provincial y que recepcionó en febrero de 2015.