Como los buenos guisos de las abuelas, la sesión plenaria extraordinaria de Presupuestos se fue cocinando poquito a poco y terminó de entrar en ebullición después de una mañana con el puchero a fuego lento. Ahora bien, antes del debate en sí de las propias cuentas, con visiones más generalistas sobre los números de este ejercicio, la corporación tuvo que analizar las enmiendas presentadas por tres de los cuatro grupos de la oposición. Una de ellas del Partido Popular, a la totalidad, que no salió adelante porque solo fue apoyada por Ciudadanos. El PP defendió un órdago a la grande cuestionando la tardanza a la hora de presentar el Presupuesto, el no reflejar nada relativo a la bajada de impuestos, la reducción del capítulo de inversiones, la no disolución de los organismos autónomos, las mociones aprobadas y no cumplidas, así como la falta de planificación y estrategia. Se criticó, por cierto, que ese reparo a la totalidad se formalizara en el Ayuntamiento apenas dos horas antes del comienzo de la sesión.

Cuenca, en Marcha! presentó cuatro enmiendas que tampoco fructificaron, en gran medida, al tener que votarse de forma conjunta, pues varios grupos de la oposición mostraron su beneplácito a algunas de ellas, no así al bloque. La confluencia pedía eliminar el gasto en arrendamiento de locales para destinar ese dinero a la reparación de instalaciones deportivas y al Servicio de Ayuda a Domicilio.

Por su parte, la enmienda de Ciudadanos, que tenía por objeto incrementar hasta 2,5 millones de euros el fondo de contingencia del Consistorio, ni siquiera fue votada por un defecto de forma, ya que el texto de la formación naranja no especificaba de dónde tenía que salir ese dinero.