El complejo municipal de piscinas ha cerrado la temporada de verano con casi 16.000 usuarios, que han pasado por las instalaciones entre el 23 de junio y el pasado 31 de agosto.   

La principal novedad ha sido que, después de dos años, las restricciones por la pandemia de la Covid-19, han desaparecido. Asimismo, la temporada ha estado marcada por una mayor afluencia de público en momentos concretos debido a las diferentes olas de calor que ha habido durante los meses de verano. 

«Hemos tenido más trabajo que en los últimos años, ha sido una temporada muy movida, con cursillos, nadadores, triatletas, bañistas, socorristas, deportistas, usuarios de baño libre por salud o alumnos de diferentes campus (de fútbol, baloncesto, atletismo, patinaje, multideporte) y usuarios de asociaciones asistenciales (como Afamit, Nueva Luz, Ademtac)», subrayan desde la propia piscina, que ya se prepara para la temporada de otoño-invierno. Previsiblemente este complejo municipal volverá a abrir a finales de septiembre y los cursos de natación arrancarán a mitad de octubre. 

Una de las últimas actividades del verano en la piscina ha sido la formación como socorristas que recibieron la última semana completa de agosto, por parte de la delegación en Cuenca de la Federación Regional de Salvamento y Socorrismo, un total de 14 jóvenes de la comarca en esta instalación taranconera.