«El arte contemporáneo tiene un problema con el humor»

V.M.
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«La muestra 'Comedia del Arte' recoge una selección de los más de 1.500 dibujos que he realizado»

Pablo Helguera, artista plástico, escritor y pedagogo. - Foto: P.H.

Desde  pasado día 10 las salas del Museo de Arte Abstracto de Cuenca albergan numerosas viñetas de carácter satírico del artista, escritor y pedagogo Pablo Helguera. Bajo el título La comedia del arte estos artoons permanecerán expuestos hasta el 8 de mayo y entremedias el propio artista visitará la capital conquense para participar en una charla de presentación, el próximo día 23, y en un seminario taller que tendrá lugar al día siguiente. Desde Nueva York, ciudad en la que reside, Helguera comenta a La Tribuna de Cuenca los entresijos de sus creaciones.

¿Qué puede encontrar el visitante en esta Comedia del Arte?

La Comedia del Arte es una mini-retrospectiva de un proyecto que comencé en el año 2008, cuando comencé a integrarme en las redes sociales. No me interesaba poner demasiadas fotos mías y por alguna razón se me ocurrió recurrir a la caricatura, actividad que he realizado desde la infancia para amigos y familia, pero que nunca había presentado en público. Estos artoons se volvieron para mi sorpresa muy populares y se puede decir, virales. Debido a que estas son caricaturas que presentan aspectos específicamente de la sociología, política y economía del mundo del arte un crítico los llamó artoons  y el nombre quedó como referente. Esta muestra recoge una selección de los más de 1.500 dibujos que he realizado a lo largo de los años y se muestran de forma sorpresiva a todo lo largo del Museo, interactuando con las obras de la colección.

¿Estos artoons pretenden ser un reflejo irónico del ecosistema cultural contemporáneo?

Me gusta más el término sátira que ironía, principalmente porque el mundo del arte está en sí mismo lleno de ironía. Podría decirse que los artoons satirizan las múltiples contradicciones, incongruencias e ironías que se dan con frecuencia en el mundo del arte. 

¿Cómo valora su experiencia como responsable de educación del Museo de Arte Moderno de Nueva York?

Trabajé en educación en museos durante 29 años. No fue una carrera planeada, sino una trayectoria un poco inesperada, que comencé a seguir primero porque necesitaba un empleo y segundo porque tenía, debo decirlo, cierta facilidad como educador. Pero esta experiencia me hizo notar las múltiples dinámicas sociales que operan en los círculos artísticos y entre públicos, curadores, coleccionistas, críticos y artista, dinámicas que luego vinieron a ser la temática de los propios artoons.

¿Cuál sería la razón por la que el humor no suele estar presente en el mundo del arte?

El arte contemporáneo, siempre lo he dicho, tiene un gran problema con el humor.  Es un problema que históricamente se origina, según mi modo de ver, del gran escepticismo que el público tiene del arte experimental: muchos lo ven como una tomadura de pelo. Para compensar y comunicar su importancia, la sobriedad en la presentación y el énfasis en el discurso intelectual buscan contrarrestar esta impresión de que el arte contemporáneo es una farsa… pero como resultado, el humor no suele ser bienvenido.

En muchas de estas viñetas parece haber incluso un interés etnográfico, ¿es así?

Muchos me han llamado un etnógrafo o antropólogo del arte. No sé si merezco esas descripciones pero el hecho es que a mí siempre me han fascinado las dinámicas sociales, y los artoons son más que nada una forma de representar mis reflexiones sobre este tema.

¿Le atrae especialmente que estos trabajos convivan con las importantes colecciones de estos artistas abstractos?

Es todo un honor para mí que estas obras convivan con otras de estas características. Debo decir aquí que los comisarios de la muestra han tenido la absoluta libertad de colocar todas mis obras donde les plazca, dado que ellos conocen su museo y su colección mejor que nadie,  y de hecho tengo una enorme curiosidad de ver el resultado final.

El próximo día 23 visitará Cuenca para participar en una charla sobre el arte de educar en disciplinas artísticas, ¿cuál será el hilo conductor de su intervención? 

El día 23 tendremos un conversatorio sobre los  artoons con el renombrado curador cubano Gerardo Mosquera, quien escribió un texto para el catálogo de esta muestra. En el conversatorio hablaremos sin duda sobre el tema del humor en el arte y de lo que pasa cuando un artista le aplica la lente sociológica al arte. 

Todo complementado con un seminario taller...

Sí, el taller estará dirigido a educadores de museos de arte y tiene el objetivo de tratar los retos y oportunidades que ofrece la práctica de la mediación en los museos.