El coronavirus no es la única pandemia que amenaza a la población a fecha de hoy. Las enfermedades mentales son otras e incluso su letalidad es mayor, puesto que se trata de un problema de salud que ha sufrido y padecido la sociedad históricamente. Tampoco ayuda que no se haya tratado esta enfermedad de igual forma a lo largo de los años e incluso todavía queda mucho trabajo por delante, especialmente, en cómo la sociedad trata estas patologías. La situación sería muy diferente si los propios ciudadanos fueran más comprensibles, como mínimo. «Es una enfermedad como cualquier otra y es necesario acabar con el estigma que existe», explica el presidente del Colegio de Médicos de Cuenca, Carlos Molina. 

La depresión, la esquizofrenia, la ansiedad o los trastornos, entre otras enfermedades mentales, son diagnósticos médicos que se detectan cada día cientos de médicos y facultativos en sus consultas. Y es que el número de casos es cada vez mayor debido a los tiempos convulsos que se viven. Para concienciar sobre las enfermedades mentales se conmemoró ayer un año más el Día Mundial de la Salud Mental. El lema de este año es: Dale like a la salud mental. Por el derecho a crecer en bienestar con tal de informar a los más jóvenes e involucrar en el cuidado y protección de la salud mental desde la primera infancia, desde las instituciones hasta los propios menores y sus familias.

Las alteraciones emocionales, mentales y del comportamiento son una realidad en la actualidad. El estado anímico de una persona puede cambiar por una situación negativa en el ámbito laboral, personal o social. Es algo común y normal. Tanto mayores como menores sufren en algún momento de su vida estas alteraciones. En cualquier caso «es importante pedir ayuda profesional cuando se padece cualquier síntoma de problema mental o se está atravesando una mala racha», destaca Molina. 

En la actualidad se ha producido una «reactivación y agravamiento» de las enfermedades mentales, tal y como confirma el presidente del Colegio de Médicos de Cuenca. La crisis económica, la invasión a Ucrania, el aumento de los precios y, en gran medida, los estragos del coronavirus son causas que han generado este incremento de casos. Carlos Molina resalta la labor de los especialistas «que son los que nos pueden ayudar en todo momento». «No sólo debemos apoyarnos en nuestros seres queridos», sentencia. 

datos. Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada cuatro personas tendrá un trastorno mental a lo largo de su vida. En España a día de hoy un 6,7 por ciento de la población padece ansiedad y el mismo porcentaje, depresión. Además, más de un millón de personas tienen un trastorno mental grave. De ahí la importancia de concienciar y confiar en los profesionales de la salud.