El Partido Popular enciende motores. Después de algunas idas y venidas en las últimas semanas, Beatriz Jiménez toma galones y presenta su candidatura a la Alcaldía con el principal objetivo de «recuperar el orgullo de pertenecer a nuestra tierra». Puesta de largo en un Paraninfo universitario lleno hasta la bandera y arropada por los principales dirigentes populares a todos los niveles. De hecho, una gran parte de los focos se los llevó el máximo responsable de la formación a nivel nacional, Alberto Núñez Feijóo, que quiso mostrar su apoyo a la joven docente, consciente de lo que puede aportar a Cuenca.

En su primer discurso como candidata –ya de forma oficial–, Jiménez comenzó a dibujar su hoja de ruta hacia el bastón de mando de la ciudad, fundamentando sus ideas en que Cuenca «sea el centro de todas las miradas, llena de oportunidades y de futuro». Un enclave único en muchos sentidos que tiene que crecer desde el ideal de ser «dinámica económicamente» y «generadora de empleo». «Una ciudad en la que vivir e invertir», remató en este capítulo la popular sin perder de vista el hecho de garantizar «el mejor futuro» para los conquenses.

Por eso subrayó que es fundamental «apoyar e impulsar» a los que generan empleo, a los autónomos y a los pequeños y medianos empresarios. «Bajar impuestos» –argumentó– «para que el dinero sirva para reactivar la economía». Entre sus principales metas de desarrollo está favorecer el emprendimiento y «ofrecer facilidades a quienes quieran crear riqueza».

Jiménez promete dejarse «la piel» y dar «futuro» a Cuenca

«Me comprometo a dejarme la piel en la tarea que me he propuesto para devolvernos el orgullo de nuestras tradiciones y para ofrecer un futuro a la ciudad», recalcó al mismo tiempo que, de forma tajante, aseguró: «Vengo a decir alto y claro, una y otra vez a todo el que quiera oírnos, que hay futuro... que claro que hay futuro para Cuenca».

En una clave más municipalista, la que aspira a relevar a Darío Dolz al frente de la Administración local, apuntó que entre sus metas se encuentran lograr una mayor limpieza de la ciudad, que se arreglen parques, jardines, centros educativos e instalaciones deportivas, y que se proporcione a la policía y a los bomberos los recursos necesarios para que puedan realizar su labor «tan necesaria».

Jiménez no dejó de lado la cuestión más política ni los asuntos de interés nacional relevantes y de gran peso mediático en este momento, empezando por la nómina de modificaciones legislativas emprendidas de un tiempo a esta tarde por el Ejecutivo que capitanea Pedro Sánchez. En esta materia, la que aspira a tomar las riendas del Consistorio conquense abogó por un gobierno del PP en la nación para «poder eliminar la sedición, la malversación y la puesta en libertad de agresores sexuales».

Jiménez promete dejarse «la piel» y dar «futuro» a Cuenca

Con la vista en Cuenca. En su intervención en el Paraninfo, ante más de 650 personas, Núñez Feijóo puso su mira en la provincia y destacó que «gracias» a los candidatos de los 238 municipios que la conforman, «van a decirle a todos los españoles» que este país «necesita la fortaleza de un relevo en el Gobierno». El líder popular alabó «el empuje, la determinación y la fuerza» de Jiménez. Una candidata para la que también tuvieron palabras de ensalzamiento los presidentes provinciales y regionales, Benjamín Prieto y Paco Núñez, respectivamente. Éste último destacó que «Beatriz siente a Cuenca muy adentro y sabe cómo proyectarla hacia el futuro». De hecho, remató, «es una apuesta segura para ganar».

El perfil de la candidata. Beatriz Jiménez nació en Cuenca hace 37 años, en el Hospital Virgen de la Luz y es madre de dos niñas. Inició sus estudios básicos en el Colegio Ramón y Cajal y amplió su formación en el Instituto Lorenzo Hervás y Panduro. De padre y madre docentes, la candidata popular heredó su «pasión» por la enseñanza, a la que sumó además su «amor» al deporte, estudiando magisterio de Educación Física en la Universidad de Castilla-La Mancha, profesión que también comparte con su marido, de origen albaceteño. En 2015 aprobó las oposiciones y consiguió su plaza definitiva en Villalba de la Sierra, aunque más tarde logró llegar a la capital.

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En clave política, durante la presente legislatura ha ejercido como parlamentaria en el Congreso de los Diputados, elegida como única representante del PP por la provincia. Entre 2011 y 2015, con María Dolores de Cospedal al frente de la Junta de Comunidades, fue diputada regional en las Cortes castellano-manchegas. Ya conoce la política municipal, pues entre 2012 y 2015 fue concejala en el Ayuntamiento en el grupo de la oposición, bajo el mandato de Juan Ávila.