Pedro Romero Sequí expone por partida doble en Sevilla

V.M.
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El artista plástico cuelga dos colecciones de temática cofrade en sendos establecimientos hosteleros, una centrado en el ciclo pasional conquense y otra en el de la capital andaluza

Pedro Romero, en su estudio de la capital. - Foto: P.R.S.

El pintor conquense Pedro Romero Sequí regresa a la capital sevillana para inaugurar este jueves dos exposiciones simultáneas en sendos establecimiento hosteleros de la ciudad andaluza, que podrán contemplarse hasta el próximo 17 de abril. Sequí ya había expuesto previamente en Sevilla, tanto en el Ateneo, como en la Cámara de Comercio, además tiene obra en algunas instituciones y en diversas colecciones particulares 

A modo de prólogo del ciclo pasional, ambas muestras son de temática cofrade, una de ellas centrada en la Semana Santa conquense y otra en la sevillana, «porque pensamos que es un año especialmente adecuado para ello, debido a la gran expectación generada en ambas ciudades por el regreso del ciclo pasional a sus calles», apunta.

«Concretamente -añadía el artista- se trata de la antigua Abacería de San Lorenzo, un establecimiento muy castizo, donde expongo Turbas de madrugada, para dar a conocer allí nuestra Semana Santa, aunque incluyo obras de todas las procesiones y hermandades; por otro lado la obra reunida en el restaurante El Cairo, situado en pleno Barrio de Triana, está centrada en la Semana Santa sevillano bajo el título de ¡Volvemos!».

En ambas muestras reúne alrededor de medio centenar de obras, todas ellas acrílico sobre lienzo, «porque es una pintura muy rápida, seca muy pronto, y la he considerado muy apropiada para la temática de las composiciones».

En cuanto al estilo de las obras, Sequí, que se declara un pintor autodidacta, asegura partir de un concepto figurativo «que incluye siempre algunos toques informales, como dice un amigo mío es pintura figurativa y desfigurativa a la vez, por esos toques y pinceladas muy sueltos».

Reconoce haberse aproximado a esta celebración desde un profundo fervor y con motivo del regreso de las imágenes y los pasos a las calles ha querido celebrar la intensidad de unas fechas donde la religiosidad popular se manifiesta abiertamente, «desde los matices artísticos, culturales, la tradición o lo más anecdótico en las calles, es una amalgama de todo… la crítica artística la tendrán que hacer otros, mi intención ha sido pintar lo que sé y lo que siento».

Preguntado por las diferencias de ambos ciclos, asegura que «aunque son distintas tienen nexos en común y conjugan la sobriedad más castellana con el regusto por el detalle y el duende de la sevillana, que encandila a todo aquel que la contempla».

Finalmente, preguntado por sus nuevos proyectos, adelanta que le han ofrecido exponer en la Comunidad de Madrid para el próximo otoño, «en esta ocasión será obra de temática distinta, mucho más enfocada hacia el paisaje urbano y el retrato».

Reconoce tener múltiples referencias a nivel artístico, ejemplo de ello cita a dos maestros tan opuestos como Diego Velázquez y Antonio Saura, y confiesa que su intención es centrarse de lleno en la pintura cuando finalice su vida laboral, porque es la mejor forma que tengo de expresar mis sentimientos».