La evolución de la pandemia del coronavirus en la provincia parece pasar por un estancamiento y experimentó un ligero repunte durante la pasada semana, desmarcándose Cuenca de la tónica generalizada a la baja del resto de la Comunidad, donde se registraron bajadas leves de forma generalizada.

Según las cifras facilitadas por el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha relativa a la duodécima semana del año (entre los días 21 al 27 de marzo), la provincia conquense subió dos puntos la tasa de incidencia por cada 100.000 habitantes, que llega a situarse en 142,19, cinco puntos por encima de la media regional y dos más de los registrados la semana anterior.

En cuanto al número total de casos también puede observarse una leve tendencia al alza, ya que subieron en cuatro hasta contabilizarse 278, cuando en la Comunidad de Castilla-La Mancha descendieron en cerca de 300, pasando de 3.105 a 2.808.

Respecto al número de municipios conquenses afectados por casos positivos de COVID-19 se mantienen en un nivel bastante similar al de la semana pasada, apenas sube en uno, con lo que suman 56 localidades, que representan algo más del 23 por ciento de los municipios que componen la provincia.

Pese a darse casos especialmente llamativos en cuanto a tasas de incidencia se refiere, algunas por encima de los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes, como pueden ser Santa María del Val, con 10.294 (siete de sus 68 vecinos están contagiados), Montalbanejo, con 2.020 casos, Puebla del Salvador con 3.208 o Villamayor de Santiago, con 1.547 (llegan a registrarse 39 casos), la tendencia es a la estabilización y en caso de los dos municipios más poblados de la provincia sube ligeramente esa incidencia, así en Cuenca capital pasaba de 170 a 190 casos por cada 100.000 habitantes y en Tarancón esa subida fue mayor, hasta 30 puntos, y queda en 96,7 (ambas en riesgo medio de transmisión).