Cuenca aspira a la "soberanía energética" con una red de calor

Leo Cortijo
-

La empresa Rebi pondrá en funcionamiento el próximo invierno una red de calor para suministrar calefacción y agua caliente a la ciudad. Esperan dar servicio a unas 10.000 viviendas y llegar a crear en torno a 200 puestos de trabajo.

Cuenca aspira a la "soberanía energética" con una red de calor - Foto: Reyes Martínez

"Este proyecto va a poner a Cuenca en la modernidad desde el punto de vista de la eficiencia energética". Así de claro y contundente se mostró el vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, en la puesta de largo de la nueva red de calor de biomasa que la empresa Rebi pondrá en funcionamiento el próximo invierno. En un contexto internacional en el que las fuentes de energía están en el ojo del huracán por el conflicto entre Rusia y Ucrania y por el encarecimiento disparado de los precios, la mano derecha de Emiliano García-Page aseguró que Cuenca puede aspirar a la "soberanía energética" en cuanto a suministro de calor y agua caliente, y es que la ciudad cuenta con una importantísima superficie forestal para suministrar la biomasa necesaria.

Todos los caminos conducen a Roma, y en este sentido desde la Junta de Comunidades destacan que este proyecto "se incardina perfectamente" con la estrategia de eficiencia energética que han diseñado. De hecho, "se han ido introduciendo" novedades legislativas en la ley de medidas frente a la despoblación, como que los edificios públicos de la región se conecten a una red de calor de este tipo cuando exista esa posibilidad. Ese será el caso, sin ir más lejos, del futuro hospital de Cuenca, tal y como avanzó Martínez Guijarro, una vez que la empresa despliegue su infraestructura en esa zona.

Un paso al frente con el que no solo se reduce exponencialmente la emisión de CO2 a la atmósfera y se genera un ahorro considerable en costes tanto para viviendas como para empresas y edificios públicos, sino que además se proyecta la creación de hasta 200 puestos de trabajo entre empleos directos e indirectos. Rebi calcula que por cada 10.000 viviendas conectadas a la red (en torno a unos 30.000 habitantes), se constituirán 160 puestos de trabajo para la obtención de los recursos forestales necesarios para suministrar servicio, además de otros 30 para la construcción de la central y una decena para su mantenimiento.

Martínez Guijarro, que alabó el trabajo silente y constante de la empresa durante el último año y medio para que este barco llegue a buen puerto, subrayó además que se trata de un proyecto "no deslocalizable", pues esta red de calor "no se puede ir a otro sitio" porque el recurso forestal del que se nutre "está a las puertas de la ciudad".

Rebi ya cuenta con todas las licencias oportunas para comenzar a desarrollar su proyecto. Así, la red abastecerá de energía térmica a Cuenca, tal y como ya hace en Guadalajara y Soria, por ejemplo. La empresa tendrá su nave nodriza en una central térmica que estará ubicada en la travesía Avenida de Cruz Roja Española 11. Desde ahí distribuirá la energía producida con astilla de madera a través de agua caliente a 90 grados por los tubos preaislados que recorrerán el subsuelo de la ciudad. El circuito, cerrado, conectará todos los edificios que deseen incorporar energía renovable, y el agua retornará fría de nuevo a la central, donde volverá a recoger energía.

Los conquenses que decidan utilizar la energía verde en lugar de su combustible fósil para calentarse no deberán pagar ninguna derrama ni hacer ningún desembolso inicial puesto que la conexión está bonificada al cien por cien, con una obra mínima en su sala de calderas.

Características de la red. La red tendrá capacidad para conectar entre 7.000 y 8.000 viviendas además de edificios no residenciales públicos y privados del sector industrial y comercial. La potencia térmica ascenderá a 29 megavatios, con una caldera de biomasa de 21 y otra de siete. Incorporará un huerto solar de un megavatio para autoconsumo en techo y suelo.

La red requiere de una gran longitud de zanja, en la que se enterrará la tubería de distribución, cubriendo casi la totalidad de la ciudad de Cuenca, a excepción del barrio del Casco Antiguo, con especial densidad prevista en las zonas del hospital y la Universidad, Princesa Zaida y Parque San Julián, Cañadillas, Fuente del Oro, Santa Teresa y La Paz, Tiradores, San Fernando y Ars Natura, Las Quinientas y San Antonio, Casablanca, La Hípica, Santa Mónica y Siglo XXI.

La biomasa procederá de, entre otros lugares, los montes municipales. Cuenca capital cuenta con más de 53.000 hectáreas de montes públicos propiedad del Ayuntamiento, y la provincia en su conjunto con más de 800.000 hectáreas arboladas, lo que ayuda a la producción de biomasa y su consumo.