Con gran afluencia de poetas, escultores, pintores y personalidades del mundo del arte conquense, el Aula Poética de Cuenca ha rendido homenaje al escultor conquense Vicente Marín, que es autor entre otras muchas obras de varios pasos procesionales de la Semana Santa conquense, como son El Encuentro, Cristo Descendido, El Bautismo de Nuestro Señor Jesucristo y el Paso de la Negación de San Pedro.

En otras ciudades como Tarancón, ha realizado el paso de La Exaltación de la Cruz y en León el paso procesional del Santo Sepulcro y el del Hombre Nuevo (Resucitado), así como otras muchas obras civiles como el Monumento a la Guardia Civil, Monumento a los Moros y Cristianos de Valverde del Júcar o La Vendimiadora, que le supuso el Primer Premio de Escultura de la Ciudad de Torrevieja y junto a este, el Primer premio de Escultura del Colegio de Arquitectos Técnicos de la ciudad de Logroño o el de Premio de Pequeña Escultura del Ayuntamiento de Madrid.

El acto ha comenzado con la proyección de varios vídeos musicados de exposiciones del artista, realizados por Macu Rubio y Ángel Aguilar, así como de entrevistas realizadas por la televisión de Castilla la Mancha en su taller. El homenaje ha sido conducido por Carlos Solano Oropesa, Coordinador del Aula Poética que ha glosado la vida y obra de Vicente Marín a través de los años y a continuación, el cantautor Rizos ha interpretado una de sus canciones.

Los miembros del Aula Poética han recitado sus poemas, varios de ellos dedicados al artista, que se ha sentido emocionado en varios momentos del acto, al que se ha llegado al final con varios regalos para este hombre genial y sencillo. Una acuarela de la pintora Carmen Orellana y varios libros de poesía y de relatos, así como las réplicas del cartel anunciador del evento.

Hermoso encuentro con un creador, con un artista de grandes dimensiones que merece un reconocimiento mucho mayor que este homenaje entrañable que hoy le ha rendido con todo el afecto y la admiración que se merece, el Aula Poética de Cuenca.