Los nuevos hechizos de 'El brujo'

Carmen Martín (EFE)
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Rafael Álvarez estrena en el Teatro Bellas Artes de Madrid 'Los dioses y el dios', una comedia repleta de ingenio que incita a la reflexión sobre la sociedad actual y sus políticos

El veterano actor suele realizar escenografías sencillas para transmitir mejor el contenido del texto. - Foto: Miguel Oses

Con el poder para embrujar al público con la palabra y una buena dosis de humor, Rafael Álvarez, El brujo, llega al Teatro Bellas Artes de Madrid con Los dioses y el dios, una reflexión libre, a partir de Anfitrión de Plauto, sobre la sociedad y los políticos, «que tienen carrera, pero no son humanistas».

La comedia es un buen arma en tiempos difíciles, «en momentos de incertidumbre». Desde el confinamiento, el público en el teatro reacciona con calor, con sentimiento, con mucho cariño, antes no era tal», cuenta Rafael Álvarez.

«Antes había una gran indiferencia, la gente venía, aplaudía, pero no se emocionaba, estaba saturada de todo», señala.

Los nuevos hechizos de ‘El brujo’ Los nuevos hechizos de ‘El brujo’ - Foto: Ricardo Rubio«Hoy, la gente está volcada en el teatro, lo que demuestra que es una necesidad vital para todos», reivindica el actor, quien considera que «los políticos desconocen la cultura, en la sociedad hay una desvinculación con el humanismo».

Considera que «los gobernantes tienen carrera, pero no son humanistas; tienen información, pero no son cultos, no tienen sabiduría», y recuerda que hace 40 años había «grandes escritores, intelectuales y humanistas que se dedicaban a la política, como Tierno Galván o Felipe González», aunque reconoce que no es partidario de este último.

Tras su estreno en la pasada edición del 67 Festival de Mérida, El brujo (Lucena, Córdoba, 1950) presenta en Madrid un «espectáculo inusual», un monólogo emocionante y cómico, que estará hasta el próximo 6 de marzo y en el que aborda cómo el ser humano se aferra a la mitología cuando se asoma al abismo de lo desconocido.

Los nuevos hechizos de ‘El brujo’ Los nuevos hechizos de ‘El brujo’ - Foto: Ricardo Rubio«El hombre tiene miedo a lo desconocido, a la incertidumbre que te saca de la comodidad, que inquieta, pero ese misterio es el impulso para que todo avance», destaca.

Actúa como un juglar, congrega al público a su alrededor y lo hipnotiza con la palabra, con palabras que arropan el alma, que hacen pensar. «La palabra es el gran instrumento creador, es el vehículo que transporta el impulso íntimo que nace del alma, que da vida».

Sus escenografías suelen ser sencillas, una idea con la que quiere transmitir que lo que importa es el contenido, no el continente. «El teatro es más profundo, va más al pensamiento que al entretenimiento», afirma este veterano de la tablas, que se enfrenta al público con solo dos elementos, «el pensamiento y el humor».