Luis Carlos Sahuquillo (Valencia, 1966), trabajador social y funcionario de la Junta de Comunidades, tiene muy claro que la opción más «sólida y consistente» es el Partido Socialista. Máxime cuando existe la «amenaza real» de que la «extrema derecha» de la provincia desembarque en el Parlamento. Por esa razón, apela al ideario «social», ante todo, de su partido, para acabar siendo el refugio de aquellos «moderados» que lo único que quieren es «progreso para sus hijos y sus nietos».

El CIS le quita un diputado al PP para dársela a Vox. ¿Lo cree posible?

No vivo ni pienso en las encuestas. Pienso en el trabajo diario y estoy palpando el buen ambiente que el Partido Socialista tiene en esta provincia de cara a las elecciones. Eso es un acicate para que el día 28 podamos tener un buen resultado, por eso vengo diciendo que podíamos ser –30 años después– la fuerza más votada. Los socialistas nos vamos a jugar nuestro segundo diputado con Vox, y por eso le pido a la gente moderada, progresista y de izquierdas de la provincia que esta vez, más que nunca, necesitamos su voto. Quien quiera que haya un presidente progresista, o vota al PSOE o su voto no va a contar, y eso puede hacer que prevalezca que la extrema derecha conquense, con alguien que acaba de aparecer, pueda tener opción de entrar en el Parlamento español.

¿Qué peso le da al fenómeno Vox?

Hay gente que ha salido del armario. El PP nunca ha tenido a su derecha un partido político. Los de extrema derecha votaban al PP y ahora tienen un espacio al que poder dirigirse. Creo que hay gente que ha oído, pero no escuchado, lo que dice Vox... Son barbaridades. Ahora bien, hay cuestiones en las que no me va a dar lecciones, como la unidad de España, que no se mide en metros de bandera, sino en trabajar para conseguir derechos e igualdad entre las personas. Confío en que al final la gente moderada, que es mucha y que quieren progreso para sus hijos y nietos, voten la opción socialista y le paremos los pies a la extrema derecha en la provincia. Ese es el objetivo.  

¿Es el Partido Socialista la opción más sólida a la izquierda debido a la tesitura por la que pasa Podemos?

El PSOE siempre ha tenido gente a su izquierda, porque IU siempre ha estado ahí. Nosotros somos serios y responsables. En diez meses de Gobierno de Sánchez hemos intentado revertir una situación muy complicada que dejó Rajoy. Además, creo que la gente quiere moderación. Las estridencias de Casado o Abascal nadie las quiere y por eso espero que la gente sensata de mi provincia lo tenga en cuenta. Hay que comparar incluso candidatos: Catalá, desde que dejó de ser ministro hasta ahora solo ha venido dos veces a Cuenca, porque esta provincia le importa un bledo. O el candidato de Vox, que aunque naciera aquí, siempre vivió fuera. ¿Cómo va a ser eso lo mismo que los que integramos esta lista?

¿Qué papel juega el otro partido de la izquierda estas elecciones?

La gente de Unidas Podemos sabe que no tiene ninguna posibilidad de tener diputado en Cuenca. ¡Qué más quisiera yo que lo tuvieran en detrimento de que lo tuviera Vox! Se lo firmaba ahora mismo..., pero saben que no es posible. Y sus votos, como no vengan al PSOE, pueden contribuir a que Vox obtenga el diputado.

En estos diez meses, ¿desde Cuenca qué se le ha pedido a Sánchez y en qué se trabajará si ganan?

Por un lado, el cementerio nuclear de Villar de Cañas que el PP ha defendido con uñas y dientes a pesar de ir en contra de los informes de los técnicos. Nosotros hemos conseguido parar ese proyecto. Y, por otro lado, la nueva comisaría de Policía, y es que en enero se aprobó una partida presupuestaria para actuar en ella. Pero hay más proyectos: la lucha contra la despoblación o infraestructuras como la Autovía A-40 hacia Teruel, la autovía hacia el Levante o el AVE Madrid-Cuenca-Valencia.

¿Cómo repercute en el votante conquense el efecto Pedro Sánchez?

La gente valora el coraje político que tuvo de presentar una moción de censura porque era indigno que el presidente fuera alguien que estaba en tela de juicio por una sentencia que decía que el PP se había financiado ilegalmente. Las formas en política son muy importantes, y la coherencia más, y Pedro Sánchez ha sido coherente.