Jesús Fuero

TERCERA SALIDA

Jesús Fuero


Arre, que te dan

24/01/2022

No hablar castellano en las Cortes de Madrid es como hablar en vasco a los de Cuenca, y ganas de «joder la marrana». Traducir en España el culé al castellano y encima pagar por ello es de genero tonto, aquí y en Estambul, en el pleistoceno y en el XII. Y si no es porque se ha perdido el norte es por algo peor que no merece la pena ni comentar. Es como si pagáramos dos veces por lo mismo, por ver la televisión en esperanto y compráramos otra con subtítulos en castellano, ¡oiga! el no va más de lo estrambótico, hortera y ridículo. Pues en eso están sus señorías, o señoríos. Todo sea porque han leído el Viejo Testamento y quieran emular lo sucedido en Babel, aunque me temo que no es eso, que ya sería jodido que lo fuese. Por poner un ejemplo de infantil diría que en Francia creen en la «igualdad» y en el idioma común, y por eso no se habla catalá en el parlament de Borbón ni en la municipalité de Perpiñán, o vasquete en Biarritz. Allende la frontera de su patrie gozan de «libertad» para hablar su jerigonza materna en el más allá, otra cosa es que lo entiendan o alguien pague por traducirlo. Y como signo de hermandad nadie despilfarra el dinero de los demás para que en los Campos Elíseos se vendan periódicos en lenguas cocooficiales. Inexplicable es que los canarios también se sumen al jolgorio excluyente, como si no tuvieran bastante con que lleguen las ayudas antes que a Lorca las del terremoto del 2012. Y lo de Baleares merece capítulo aparte, solo les queda reclamar la supremacía como «honderos» que tenían cuando Roma daba por saco allende el Taxo. Y por supuesto arrinconar un poquito más (ya es difícil) a Jovellanos. 
En corteslandía alguien honrado de una supra-autonomía, e sea, un bicho raro, podría decirlo en los idiomas cooficiales de España y luego traducirlo el mismo, para que veamos que listos son. Ahora resulta que el español es una herramienta del franquismo, ¡y yo que pensaba que el castellano se glosó en un monasterio riojano porque era el lenguaje que todos entendían y en el que se expresaban! Pero resulta que no, que en la corona de Aragón en Barcelona al rey le hablaban en bable, y en el virreinato de Nápoles a don Juan de Austria le hablaban en el alemán de su abuelito Carlos. Y me surge una duda ¿Cómo el autor del Quijote habiendo estado en Barcelona varias veces no utiliza el catalán ni para maldecir? Los de Babel por su impericia fueron castigados tsunamimente, en versión Ebro que se desbordase a lo bestia, y ahora los estelados son arrasados por su dependencia de golfantes con menos empresas, más deuda, más ruina, menos inversión, peor concordia. Ni el Fútbol Club Barcelona que aupó un tal Franco les libra de la debacle, de su peor sanidad, menor justicia, y falta de libertad. Salvedad los que tenían que estar en la cárcel y apadrinan la ruina en beneficio propio. Roures. Lo del nacionalismo es una entelequia que los politiks separatistoides se han inventado. Desde la centralidad, y para no ofender, se los llama «nación de naciones» y otras chorradas que son eufemismos para ocultar su cobardía y felonía. Allí, por Cat y vasconia, los que apenas tenemos para comer patatas refritas pagamos el pollastre al ast de Colau, y al dantzari Josechu un horrible chacoli, y la uni en la que bajan la nota para que niñes de Castille estudien en un valencià que no vale pa xiquets de provecho. Y arre borriquito, que te dan.