La hoja de ruta de Vía Ágora en Cuenca permanece inalterable a pesar de los pesares y las marejadas que han convulsionado el tejido empresarial en los últimos tiempos. De esta forma, aunque se ha producido un «cierto retraso» en la puesta en marcha de la fábrica de su filial, Lignum Tech –ubicada en el polígono Sepes–, «primero por la pandemia y después por la guerra de Ucrania y el cierre del puerto de Shanghái», el pistoletazo de salida ya asoma en el horizonte. Según las previsiones del propio presidente de la compañía, Juan Antonio Gómez-Pintado, en julio instalarán la maquinaria necesaria para empezar, en agosto acometerán la formación de los trabajadores y en septiembre se alzará la persiana.

En este apartado, las perspectivas de creación de empleo de la mercantil son muy esperanzadores. En torno a 120 puestos de trabajo, esa la meta. Unos 90 empleos en Lignum Tech y 26 más en la fábrica de baños. Asimismo, Gómez-Pintado dibujó un buen escenario para este sector, que «no está siendo de los más perjudicados» por la crisis, ya que tiene «mucha demanda cautiva y eso está impulsando las ventas». Además, el alza de los precios en las materias primas y los combustibles, aún teniendo impacto, no está siendo tan gravoso como para otros sectores. Es más, «la previsión de bajada de materias primas ya se está empezando a producir», y de esta forma, el acero, el aluminio o el cemento «empiezan un declive que estimamos que alcance cotas similares previas a la pandemia».

Gómez-Pintado realizó estas declaraciones durante la clausura, en el centro de formación de la Fundación Laboral de la Construcción en Cuenca, del primero de los dos cursos de operaciones en la fabricación de baños industrializados. Una formación dirigida íntegramente a mujeres, que tiene como principal objetivo «facilitar su incorporación al proceso constructivo», además de «impulsar la generación de riqueza y empleo en la España vaciada». 

Lignum Tech, empresa de sistemas constructivos industrializados, en colaboración con la Fundación Laboral de la Construcción, el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Ministerio de Trabajo y Economía Social, ha desarrollado esta acción formativa multidisciplinar, que incluye un compromiso de contratación del 40 por ciento de las alumnas que finalicen satisfactoriamente la formación. Se trata del único curso en el mercado que aborda varias disciplinas y viene a dar respuesta a la necesidad de incorporar a la mujer a la industria de la edificación y la construcción, donde cuenta actualmente con poca representación. Por el momento, ya se han iniciado dos ediciones del curso de especialización –el 9 de mayo y el 10 de junio–, con las que se prevé formar a una treintena de mujeres de la región.