La Asociación de Comercio hace balance de la campaña de Navidad, en la que se concentran algunos de los días más importantes de todo el año para el sector a juzgar por el volumen de ventas. El presidente del colectivo, José Miguel Bermejo, destaca que las sensaciones han sido «buenas», pues 2022 fue un año «muy complicado por muchos factores con un fuerte incremento de los gastos» y, al final, esta campaña ha servido para que «los comercios al menos acabáramos con una buena sintonía». Una campaña, por cierto, en una línea «similar» a la anterior, «lo que no es mala noticia en un ejercicio complicado». Eso sí, «todavía no se han recuperado los números que teníamos previos a la pandemia».

El posible retroceso en las ventas viene determinado por el incremento de la inflación. «Estamos vendiendo lo mismo que el año pasado o incluso un poco más en importe, pero por este dinero nosotros no estamos vendiendo la misma cantidad que en 2021 porque los costes han crecido», argumenta Bermejo.

Lo que está fuera de toda duda es que la Navidad es una época propicia para el consumo y que acciones que fomenten el mismo, como la propia iluminación o la programación navideña, supone un capotazo para este sector. El máximo responsable del mismo en la provincia subraya que les parece «bien» que se realicen actuaciones que «acerquen a las personas a las zonas comerciales», para después cada comercio obtener sus propios «resultados y sensaciones». Por si fuera poco, les toca competir con las grandes cadenas y la venta online, lo que resulta «prácticamente imposible». «Lo que estamos haciendo» –dice Bermejo– «es empezar a convivir con estos factores que ya de por sí dificultan mucho la actividad comercial».

Concejalía de Consumo. De esta forma, desde la Asociación de Comercio solicitan que «de cara a las siguientes elecciones» se mantenga la figura de la Concejalía de Comercio, ya que «consideramos que es un aspecto fundamental para proteger el sector y también para Cuenca porque una ciudad sin comercio es una ciudad muerta».