La cifra de pernoctaciones en establecimientos hoteleros en la provincia conquense durante el mes de diciembre pasado superaron las 36.000, lo que equivale a más del triple de las contabilizadas en el mismo período de 2020, aunque respecto a noviembre cayeron un 11,2% en buena parte debido a los efectos de la sexta ola del COVID.

El incremento porcentual es muy similar al del número total de viajeros que se alojaron en establecimiento de la provincia, concretamente 18.879, cantidad que multiplica también por más de tres la registrada en diciembre de 2020, aunque nuevamente supone un descenso negativo respecto al mes anterior, en este caso del 15,4%. 

Y es que después del punto de inflexión que supuso septiembre la notable evolución al alza fue la tónica en octubre y noviembre, cuando llegaron a contabilizarse 40.610 alojamientos, una tendencia que se truncó en diciembre, aunque con índices de ocupación muy por encima del primer año de la pandemia.

Atendiendo a la procedencia, las pernoctaciones de los viajeros residentes en España representan una abrumadora mayoría sobre el total, un 90,4%, según la Encuesta de Ocupación Hotelera publicada por el INE, porcentaje muy similar en lo que se refiere a viajeros, un 89,1%, con un especial protagonismo de los residentes en Madrid y Comunidad Valenciana, con un 24% del total en el caso de la primera y un 23,9 en la segunda (aunque aquí las pernoctaciones representan el 21%). 

Los datos del INE también revelan un aumento del número de establecimiento abiertos estimados en la provincia respecto a diciembre de 2020, un 20,7% más, hasta llegar los 122 actuales. En referencia a la capacidad de alojamiento, tanto por número de habitaciones estimadas, como por número de plazas, se  aprecia nuevamente  una ligera subida similar en ambos casos: del 30 y del 34%, respectivamente, ya que el número de plazas estimadas era de 4.714 y el de habitaciones de 2.368,  cuando en esas mismas fechas de 2020 se contabilizaban 3.510 y 1.816, respectivamente.

Asimismo, el personal empleado en los establecimientos hoteleros repunta de forma importante en el último año y llega a duplicarse, pasando de 226 empleados a los 455 actuales.