Más de 50 escolares de tercero de Educación Primaria del colegio público Gloria Fuertes han participado esta semana en una plantación de árboles que ha llevado a cabo el Ayuntamiento en camino del cementerio, a la altura de las puertas más antiguas de acceso al camposanto municipal de Santa Marina.
Junto a personal de Jardinería del departamento municipal de Obras y Servicios, y la técnico de Medio Ambiente Ana Belén Rubiato, los alumnos plantaron un total de doce almendros, que se comprometieron a regar, sobre todo durante el primer año. No obstante, será el Consistorio taranconero el que mantenga el riego de estos árboles, igual que el del resto de zonas verdes del casco urbano, a través del Servicio de Jardinería.
Toda esta plantación se llevó a cabo como un juego, ya que los estudiantes no sabían de antemano dónde iban a plantar, tampoco cómo ni de qué especie y tuvieron que ir descubriéndolo a través de diferentes pistas preparadas desde la Concejalía de Medio Ambiente. «Nada más salir del colegio les propusimos esta especie de gymkhana y estuvieron muy receptivos, todos llegaron bien al sitio programado y sabían que iban a plantar almendros», cuenta Rubiato, que destaca cómo los escolares rellenaron fichas sobre los beneficios de los árboles en diferentes puntos, como la Biblioteca Municipal Luis Rius, hasta ir aproximándose al lugar de la actividad. «Los árboles nos dan el oxígeno para respirar, nos dan frutos, en este caso las almendras, que además llevamos y las pudieron probar, a través de ellos conseguimos la sombra en verano en los caminos, son refugio de animales, pues muchos hacen sus nidos», comenta la técnico municipal.
cambio de estación. En el camino a esta plantación profesores y alumnos pudieron ver algunos almendros ya en flor, y es que los árboles, recuerda Ana Belén Rubiato, tambiénnos indican el cambio de estación. «Los almendros que vimos estaban llenos de flores que olían a miel, y es que podemos disfrutar de la miel del almendro, de almendras para hacer turrón, la leche de alemdnra, que la podemos usar como crema natural», detalla.
Entre finales de enero y principios de febrero se llevó a cabo otra actividad similar en el paraje de Peña El Águila, con la participación de alumnos del colegio Melchor Cano y la plantación también de almendros. Además, el Ayuntamiento ha plantado recientemente más de 260 árboles, en este caso a través de una empresa, en el camino de la ermita. Como ya destacaba la concejal de Medio Ambiente, Elisa Sánchez, son demostraciones del compromiso del Consistorio taranconero con el Medio Ambiente y de la concienciación de su importancia a toda la población, con la implicación de la comunidad educativa.