Los datos estadísticos ponen en entredicho, una estación más, la percepción generalizada de que en Cuenca hace mucho frío.
Según la información facilitada a La Tribuna por Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), los conquenses han despedido un invierno «extremadamente cálido», frente al resto de habitantes de la región para los que ha sido «muy cálido».
La delegada territorial de la Aemet en Castilla-La Mancha , Paloma Castro, señala que la capital conquense tuvo una temperatura media de 8,1 grados durante los meses de diciembre, enero y febrero; periodo para el que el valor medio es de 5,3 en la serie histórica.
A nivel nacional, se ha tratado del invierno más cálido del siglo XXI y del segundo más cálido desde el comienzo de la serie en 1965, por detrás del invierno 1989-1990.
Por lo que se refiere a las precipitaciones, Cuenca capital ha finalizado el invierno registrando unos niveles que para la Aemet se engloban «dentro de lo normal». En concreto, en el periodo de diciembre de 2019 a febrero de 2020 se recogieron 110,2 litros por metros cuadrado de agua, cifra que ronda la media histórica de 132,6 litros.
En cuanto a la provincia, destacan las lluvias registradas el pasado 20 de diciembre, coincidiendo con el paso de la borrasca Elsa, cuando en tan sólo 24 horas se recogieron 60 litros y medio por metro cuadrado en Cañizares, 55,8 en Beteta y 50,2 en Salvacañete. O las lluvias registradas el pasado 2 de marzo, que dejaron 37,2 litros en Beteta y 36,1 en Cañizares.
Las precipitaciones en forma de nieve tampoco han sido abundantes. En el observatorio de Cuenca sólo se registraron en una jornada, mientras que en Ciudad Real fueron tres, en Molina de Aragón cinco, y en la base aérea de Albacete dos, la mayoría de ellas en enero.
PRIMAVERA. Si bien desde la llegada de la primavera el pasado 20 de marzo, el tiempo ha estado caracterizado por cielos cubiertos y chubascos dispersos, la predicción augura una estación más cálida de lo habitual y con unos niveles de precipitaciones en la línea de los últimos años.
El avance de la predicción estacional provisional de la Aemet prevé que las temperaturas durante los meses de abril, mayo y junio de 2020 en toda España se sitúen en el tercil superior (por encima de lo normal o cálido) del periodo de referencia 1981-2010.
En relación a las precipitaciones, Castro indica que hay una mayor probabilidad de que éstas se encuentren por debajo de lo normal en el norte, mientras que en el resto del país se situaría en la media climatológica del citado periodo de referencia.
COVID-19: ESPERANZA ANTE EL AUMENTO DE TEMPERATURAS
Desde la Aemet se muestran esperanzados con el hecho de que el aumento de la temperatura y la disminución de la humedad durante los próximos meses frenen la expansión del Covid-19.
Aunque no hay datos concluyentes sobre el comportamiento de este nuevo patógeno, estudios realizados a otros virus similares como el MERS arrojan que las condiciones meteorológicas influenciaron de forma importante la propagación e incidencia del virus.
Como precisa la delegada Paloma Castro, “estos patógenos tienen una mayor incidencia y posibilidades de contagio en condiciones relativamente frías, similar a los patrones estacionales que presentan otras enfermedades respiratorias en climas templados”, siendo los contagios más habituales en otoño o invierno.