Antonio Pérez Henares

PAISAJES Y PAISAJANES

Antonio Pérez Henares


Trasvase, una opinión a contracorriente

27/01/2023

Por delante, y con honradez y respeto, manifiesto lo que siempre y al respecto he pensado. He sido partidario y entendido, como necesidad y progreso, a pantanos y trasvases. Desde los acueductos romanos a los embalses actuales y a sus conexiones con otras cuencas. Y he entendido y sigo entendiendo, aunque Cristina Narbona, lo dinamitara, que el agua es un bien común de todos los españoles.
Entiendo que ello está con el avance, el futuro y se inscribió siempre en la corriente progresista de nuestra historia. Y como tantas otras cosas así sigue siendo, aunque ahora las doctrinas de moda los tilden de 'fascistas'. Fascistas todos, desde hace dos mil años, pasando por los regeneracionistas del finales del XIX encabezados por el aragonés Joaquín Costa y por supuesto por el socialista, asturiano de nacimiento y bilbaíno de adopción, Indalecio Prieto, a quien se debe el gran plan de llenar España de pantanos y crear conexiones entre los más caudalosos ríos y la cuencas más sedientas. El franquismo lo copió y se aprovechó del mismo y puso en marcha su primera parte y un trasvase, no el más indicado, por ser de cabecera, del Tajo al Segura.
En la democracia tanto el partido socialista en su primera etapa de 13 años largos de gobierno encabezados por González, como los 8 del PP de Aznar prosiguieron por esa misma senda. Borrell fue adalid de la causa y su propuesta en metros cúbicos era mucho más ambiciosa que la que Aznar logro luego ver aprobada por Europa dispuesta a aportar los fondos y dineros necesarios.
El trasvase del Ebro era decisivo, racional, el más indicado y menos lesivo, que se completaba con un plan de Agua para Aragón y únicamente aprovechaba los excedentes ya casi en la desembocadura. Muchas fueron las comunidades autónomas gobernadas por los socialistas, Andalucía y nuestra Castilla-La Mancha, con Bono de mascarón de proa, quienes lo aplaudieron y aprobaron la iniciativa. El clamor de campanario y Zapatero lo cancelaron y de aquello ya no quedan ni las raspas ni nadie que ose ni siquiera reabrir el debate.
Solo quedó el trasvase del Tajo, que, con sus problemas, al ser cabecera no recoge el agua necesaria y que permita además mantenerla en un nivel aceptable, que siguió más menos cumpliendo su cometido. En época de Cospedal se estableció un mínimo bajo el cual no podría trasvasarse.
Pero ahora, y de ello Page ha hecho bandera, lo que ya se afecta es al trasvase mismo, aunque por una vía adyacente. Ya no se trata del nivel aceptable en la cabecera sino establecer un llamado caudal ecológico en todo su recorrido establecido por el Ministerio de Ribera. Conclusión: en el 2027 tras ir reduciendo año a año la cantidad trasvasada se cerrará el grifo hacia Murcia y Alicante. Los destrozos a su agricultura, lo de las desaladoras de Narbona, como alternativa al trasvase del Ebro, ha sido peor que un fiasco. Un completo desastre es lo que amenaza a esas huertas, a esa riqueza y a esas gentes que viven del sector agrario, a Murcia, a Alicante y a España. Porque son España.
Y yo pienso que el agua es un bien común, y con toda la consideración y prioridad para con la zona en donde nace y fluye el agua, ese bien no es privativo de ellos sino patrimonio común de los españoles. Con esto como con tantas cosas es eso lo que se rompe, se destroza y con lo que se separa. Y diré lo que me parece: secesionismo y separatismo aldeano por encima del progreso común y el interés general de la ciudadanía y la Nación española. Puedo decirlo, además, porque no soy político, que ya saben que es ante todo obediencia debida e interés de partido y electoral por encima de todas las cosas.
Pero como natural de Guadalajara quiero decirles algo más a mis paisanos y en especial a los ribereños del Tajo en esos tramos. Se la están metiendo doblada. Para las cabeceras, para los pantanos de Entrepeñas y Buendía esto no solo no será beneficioso, sino puede empeorar la situación y que en absoluto supondrá el aumentar los niveles, sino que puede que los haga descender aún más. Se soltará, aunque no vaya para las huertas del Levante, el agua cauce abajo y en una cantidad superior a la actual. Los pantanos beneficiarios serán los de más al suroeste ya en Extremadura, provincia de Cáceres, enlazados unos con otros y con una muy superior cabida pero que ya se encuentra ahora en casi un 75% y los que existen en el vecino Portugal.
Pero hay otra cosa en proyecto, el desvío de ese trasvase actual, el 'caño' hacia otras tierras, en concreto hacia La Mancha. Ellos si pueden ser en un futuro a quienes aproveche lo que ahora ya es ley. Y desde luego una innegable victoria de Page y si se quiere de la comunidad autónoma. Pero a mí no me gustan estas victorias en detrimento y perjuicio de otras regiones de España y de otros españoles.
Sé, por supuesto, que mi opinión no solo es impopular y minoritaria, sino que será denostada por muchos y desde todos los lados. Pero entiendo que más que nunca, es obligación personal exponerla con claridad y sin tapujos. Por muy a contracorriente que se vaya y por muy solo que uno se quede. Y es que a mí el nacionalismo, de cualquier tipo, sea identitario, de taifa o de acuífero no me ha gustado nunca y me ha parecido siempre el peor, y origen, de nuestro cáncer.