Desde hace mucho tiempo, en los medios de comunicación se utiliza la palabra “ahora” con aires de crítica y de descalificación. Como los medios han sucumbido a todo lo malo que aporta la política, habrá que concluir que el uso espurio del término vino dado inicialmente por sus señorías y el afán incombustible que tienen de destruir a todo aquél que piense diferente. Cuando informamos de algo que alguien ha hecho o dicho y se contradice con lo que hizo o dijo en el pasado, colocamos el insultante “ahora” para dejar en evidencia al cerebro blando, el lumbreras que ha cambiado su criterio o sus actos. La sorpresa ha sido encontrarnos esta semana un “ahora” mayestático en el eslogan de precampaña de un partido político: “Ahora Gobierno. Ahora España”. El PSOE inicia su asalto a un poder con más garantías que las que le dieron los españoles en abril centrándose en la importancia del momento presente.

Desconozco cual es el procedimiento por el que los partidos políticos eligen los lemas de las precampañas y las campañas electorales, si hay una tormenta de ideas entre todos los compañeros o se confía en una agencia publicitaria que piensa por ellos. O si unas veces es así y otras asá. Pero creo que a los estrategas del partido en el gobierno cesante en funciones les han metido un golazo por la escuadra. Porque aclarar a toda la opinión pública española que “ahora” se va a volcar en España, que va a defender a España, que va a preocuparse por España, es como reconocer que “antes” no lo hizo, y lo que es peor, adelantarnos que “después” tal vez deje de hacerlo, cuando los efluvios de las urnas y la resaca de los carteles electorales dejen paso a la cruda realidad del día a día. Como los juicios de intenciones sobre lo que se hará en el futuro están cargados de mala fe, destaquemos las verdades arriesgadas de lo que se hizo en el pasado: alcanzar el gobierno gracias a partidos que quieren destruir el concepto de España, aceptar una mesa de diálogo con relator incluido sobre la separación de una parte de España, insinuar que se concederán indultos a los presuntos golpistas que han pervertido el orden de la Constitución de España, pactar en ayuntamientos, comunidades y alguna otra institución con las formaciones políticas que promueven la división de España, y rechazar la moción de censura que pretende cuestionar al dirigente que según auto judicial estaba al tanto de los atentados que se iban a cometer en una parte de España dentro de pocos días. El “ahora” del eslogan es más pragmático: apuesta por un 155 en funciones para llevarse al huerto a los despistados que descuidan lo que “antes” ocurrió.