Alejandro Ruiz

EL REPLICANTE

Alejandro Ruiz


La España adolescente

22/07/2021

La división de poderes es el método más adecuado para evitar el absolutismo, el uso abusivo y arbitrario del poder concentrado en unas únicas manos, aunque algunos pretendan que la división de poderes se limite a un simple reparto de funciones entre unos órganos controlados por quien ostenta el poder ejecutivo. De hecho, la garantía de la libertad para asegurar que no se produzcan situaciones de concentración de poder que puedan llevar al abuso de poder, como base del ordenamiento jurídico, se ha cuestionado recientemente por las ministras Pilar Llop y Margarita Robles, que se han permitido atacar políticamente al Tribunal Constitucional, tergiversando el sentido de la sentencia sobre el confinamiento domiciliario en el primer estado de alarma, en un insólito ejercicio antidemocrático propio de las dictaduras bananeras que todavía ensalzan y protegen con regusto romántico, nostálgico y adolescente.
Wikipedia, sobre el dictador cubano Batista, empieza diciendo que «Fulgencio Batista fue un militar y dictador cubano», mientras que sobre el dictador Castro, dice que «Fidel Alejandro Castro Ruz fue un abogado, político y guerrillero marxista cubano. Después de derrocar a la dictadura de Fulgencio Batista gracias a una guerra de guerrillas durante la Revolución cubana, fue mandatario de su país por 50 años, como primer ministro y presidente». Y luego, en una magnánima concesión se atreven a poner que «ha sido calificado de dictador, principalmente por el lapso extendido y carácter autoritario de su mandato». Es decir, que no es que sea dictador a ciencia cierta, no, solo que ha sido calificado como dictador, y porque parece que era algo autoritario. Y todo ello pese a los 50 años en el poder, con partido único, sin que los cubanos sepan lo que es una urna, sin separación de poderes ni libertad de prensa y demás libertades y derechos individuales fundamentales.
Se trata del regreso a la infancia en una inmersión con regocijo de personalidades inmaduras, narcisistas, irresponsables y arrogantes. Esta eterna adolescencia de algunos, que solo se puede explicar por la añoranza entrañable de aquella época en la que las hormonas mantenían dopadas a las neuronas. Por la nostalgia adictiva de las imágenes y las emociones vividas en la adolescencia, que el poder vigente aprovecha para el adoctrinamiento y el sectarismo. El sentimiento adolescente de la actual ideología dominante, que sirve para mantener una interacción emotiva con sus acólitos, y es la antítesis del racionalismo de la Ilustración, del discurso, la persuasión, la elocuencia, la solidez de los fundamentos, la oratoria, la retórica, la dialéctica y la ciencia. Ya va siendo hora de que tiréis el poster del Che a la basura.
Simplemente, el hecho de que en un país democrático de la Unión Europea, como es España, exista todavía el debate sobre si Cuba es una dictadura, debería abrir el debate sobre si España es una democracia, o si vamos camino de no serlo.