La Fundación García y Chico presentó este pasado viernes su última creación en su sede de la calle La Paz, en el barrio del Castillo. Se trata del libro Organomecánicos que reúne una selección del dibujos del artista José María García Gutiérrez, fallecido en 2010. 
La cuidada edición muestra criaturas extraordinarias e imposibles, entornos mágicos y propios de la ciencia ficción que combinan lo real con lo imaginario. Figuras, entes y engendros ideados por un pintor adelantado a su tiempo que interpretó «desde el famoso grabado del rinoceronte de Durero, a las construcciones distópicas de la animación de Mizayaki, los seres y estructuras de la escenografía de Giger, los dibujos imposibles de Escher o las viñetas de Moebius», cuentan desde la fundación. 
La publicación es una propuesta que se gestó en 2020, coincidiendo con el décimo aniversario de la muerte del pintor, pero tuvo que retrasarse por la pandemia. Ahora ve la luz, cuando las circunstancias lo permiten, en un volumen que recoge las particulares visiones fantásticas de García Gutiérrez en aproximadamente 25 láminas. 
Trazados. La selección, llevada a cabo por su viuda y también pintora, María Luisa Chico de Castro, aglutina ilustraciones «imaginativas, de calidad y muy modernas», que se realizaron «hace 20 y 30 años». García Gutiérrez, catedrático de la facultad de Bellas Artes de Madrid, «estaba muy centrado en la geometría, de la que era profesor. Tiene varios libros publicados sobre sistemas de representación y, paralelamente, con mayor intensidad, trabajó en su obra personal», explica la también directora de la fundación.
Los dibujos, que se exponen en una de las salas de este coqueto museo de la barriada del Castillo, suman el trazado a plumilla del artista que utilizaba tintas de distintos materiales. «Hay alguna obra en color, porque también empleaba acrílicos y mezclaba», señala Chico, que reconoce que el museo cerró con la pandemia «pero la actividad interior en la fundación ha seguido su curso, tanto con la pintura como en el cambio de cuadros de las salas». De hecho, este pequeño museo ubicado en una antigua casa de labranza puede visitarse actualmente todos los viernes, sábados y domingos, de 11 a 14 horas. En este singular espacio, de obligada visita, se recoge las obras mencionadas de García Gutiérrez y los paisajes realistas de la propia María Luisa Chico.