Hace justo dos semanas se efectuó el primer pago del Ingreso Mínimo Vital a casi 75.000 hogares de todo el territorio nacional reconocidos de oficio procedentes de la prestación por hijo a cargo. Según los últimos datos, esta renta básica ha llegado ya a 201 familias conquenses, que cobran una prestación que varía entre los 462 y los 1.015 euros al mes en función del número de personas que convivan en ese hogar y de sus características particulares.

Con esta horquilla sobre la mesa y si establecemos una prestación media de 700 euros por hogar, podemos concluir por tanto que el Ingreso Mínimo Vital ha puesto a circular en territorio conquense una cifra cercana a los 140.000 euros al mes. La cantidad no es moco de pavo y eso es algo que recalca el subdelegado del Gobierno central en Cuenca, Juan Rodríguez. 

Éste es un dinero que va a beneficiar de forma directa a todas esas familias en situación de especial vulnerabilidad, pero también, indirectamente, a los negocios privados que se dedican a sectores básicos como la alimentación, la ropa o los productos de higiene. «Es un dinero que las familias necesitan, que se van a gastar mes a mes y la economía circular va a funcionar porque va a ser una inyección más de dinero dentro de la economía provincial», destaca Rodríguez.

Inmersos ya en las consecuencias económicas que se derivan de las sanitarias provocadas por el coronavirus, el subdelegado subraya que ésta es «una medida más que viene a complementar la batería de medidas, que son muchas», con las que el Gobierno pretende atajar la compleja coyuntura económica actual. No hay que olvidar, añade, que se trata de una medida «histórica» y que pretende dos objetivos fundamentales. Por un lado, «reducir la pobreza extrema», y por otro, «fomentar la inclusión social». De ahí que su valoración «no pueda ser otra que muy positiva», ya que lo que pretende es «no dejar a nadie atrás en este momento». No en vano, «afecta a un sector de la población muy determinado, en el que más de la mitad de los beneficiarios son niños».

Pobreza extrema. Ahora bien, Juan Rodríguez va más allá y no pone el foco únicamente en la situación actual a la que se ha llegado como consecuencia de la emergencia sanitaria. En su opinión, existe una «crisis estructural» que España viene arrastrando «desde hace ya muchísimo tiempo, que no es algo nuevo», y que arroja un dato esclarecedor, y es que la tasa de pobreza extrema del país se encuentra muy por encima de la media europea. «No podemos olvidar que aproximadamente un 7 por ciento de los hogares españoles están dentro de este baremo, duplicando prácticamente la media de los países de nuestro entorno», argumenta.

De esta forma, entiende, «hablamos de una situación estructural que el Gobierno pretende corregir y que se ha visto agravada por esta crisis económica derivada del Covid-19 y que se afronta de una manera decidida con el objetivo de que nadie se quede atrás en esta lucha contra las dificultades económicas».

El Congreso de los Diputados aprobó por mayoría absoluta, y con la única abstención de Vox, el real decreto ley por el que se iba a tramitar el Ingreso Mínimo Vital. Eso es algo que celebra el máximo representante del Gobierno en la provincia, ya que considera que es «bueno en situaciones tan duras como las que estamos viviendo tanto la unidad de acción como de objetivos». Asimismo, Rodríguez destaca que habría que tener en cuenta que «no solo es una cuestión de que los partidos se pongan o no de acuerdo», sino que además, desde 2014, «la Unión Europea está recomendando a España que mejoremos la cobertura y la eficacia de los sistemas de renta mínima». Por lo tanto, sentencia al respecto, «es dar cumplimiento a algo que en España no estábamos haciendo nada bien».

Según los cálculos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, más de 830.000 hogares podrían ser beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital en toda España. En ellos viven unos 2,2 millones de personas de los que la mitad son menores. En el caso de Castilla-La Mancha ya se benefician 2.992 hogares en los que viven 10.388 personas.

PREGUNTAS Y RESPUESTAS DEL IMV

1. ¿Qué es el Ingreso Mínimo Vital?

Es un conjunto de medidas articuladas en torno a una nueva prestación de la Seguridad Social que garantiza unos ingresos mínimos mensuales a hogares en situación de especial vulnerabilidad. El IMV pretende corregir los problemas estructurales de acceso a oportunidades de formación y empleo, lo que ocasiona una gran desigualdad.

2. ¿Qué objetivos persigue?

Reducir la tasa de pobreza de España, mayor que la de los países de nuestro entorno, y hacer más redistributiva la acción del Estado. La pobreza imposibilita a los hogares más vulnerables el acceso a oportunidades que les permitan salir de su situación y les condena a una exclusión social estructural.

3. ¿A cuántos hogares llega?
La prestación puede llegar a unos 850.000 hogares en los que viven aproximadamente 2,3 millones de personas. Casi la mitad de esos hogares tienen menores a cargo y entre 70.000 y 100.000 son monoparentales. Esos 850.000 hogares se encuentran entre el 17% más pobre de la población, con una renta disponible media que no llega a los 310 euros mensuales.

4. ¿Qué requisitos se necesitan para cobrarlo?
1. Cumplir las condiciones de vulnerabilidad económica que se establecen.
2. Tener más de 23 años (salvo que tenga algún menor a su cargo) y menos de 65.
3. Residencia continuada e ininterrumpida en España durante al menos el año anterior a la presentación de la solicitud y residencia legal en el país en el caso de ciudadanos extranjeros.
4. Para los solicitantes que viven solos, no integrados en una unidad de convivencia, se exige haber vivido durante al menos los tres años previos a la solicitud de forma independiente de los progenitores.

5. ¿Qué es la vulnerabilidad económica?
Que la renta del hogar del solicitante no llegue al umbral de ingresos fijado para ese tipo de hogar. Se hace un test de patrimonio que excluye a quienes superen los límites fijados para cada tipo de hogar, partiendo de los 16.614 euros para los unipersonales, descontada la vivienda habitual.

6. ¿Cómo funciona?

El IMV asigna a cada tipo de hogar un umbral personalizado mínimo de renta mensual. Ese umbral varía entre los 462 y los 1.015 euros al mes en función del número de personas que convivan como beneficiarios y de sus características. Si la unidad de convivencia dispone de ingresos preexistentes, su IMV será la diferencia entre esos ingresos y el umbral establecido para ese hogar.

7. ¿Cuándo y dónde se puede solicitar?

Se puede solicitar desde el 15 de junio. Las solicitudes presentadas durante los tres primeros meses (hasta el 15 de septiembre) tendrán efectos económicos desde el 1 de junio. Es una prestación de la Seguridad Social y se solicita al INSS.