De poco sirven las reflexiones del 8-M cuando apenas dos días después la tragedia vuelve a cebarse con el colectivo femenino. A la mujer fallecida el sábado en Málaga a manos de su pareja se suman hoy, desgraciadamente, otra malagueña y una pontevedresa.

La primera de ellas, una mujer de 58 años y nacionalidad española ha sido asesinada a puñaladas, en presencia de un hijo menor, en Estepona presuntamente por su marido, un ciudadano británico de 55 años, que ha sido detenido e ingresado en un hospital tras provocarse lesiones.

El crimen fue cometido sobre las 23,45 horas del sábado en la avenida Reina de España cuando el hombre presuntamente agredió a su esposa con un arma blanca en varias partes del cuerpo, entre ellas el pecho y el abdomen, en presencia de un hijo menor, según han informado fuentes policiales.

Según estas fuentes, no constan denuncias previas de malos tratos de la víctima y se trata de un caso de violencia de género.

Tras la autorización judicial del levantamiento del cadáver, el cuerpo ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de Málaga, donde se le practicará la autopsia, mientras que la Policía Judicial y Científica ha tomado muestras.

El presunto asesino está detenido por la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de las investigaciones, y ha ingresado en el Hospital Costa del Sol de Marbella (Málaga) con heridas leves en las muñecas; su estado es estable y pendiente de valoración.

Por otro lado, un hombre de 46 años ha asesinado a su mujer en su domicilio del municipio pontevedrés de Valga, tras lo cual se ha quitado la vida, según las primeras conclusiones, todavía provisionales.

El crimen ha sido perpetrado hacia las 15,00 horas en el interior de la vivienda en la que residía la pareja y la hermana de la víctima, que se desplazó a la casa al ver que el matrimonio no acudía a una cita y halló los cuerpos sin vida de ambos en lo que aparenta ser un crimen machista.

La mujer forzó la puerta de entrada de la vivienda y halló los cuerpos sin vida de su hermana y de su cuñado, ambos con heridas por arma de fuego

La victima, M.J.A.G., tenía un disparo en el pecho, mientras que su marido tenía signos de haberse suicidado disparándose en la cabeza, presuntamente con el mismo arma.

La pareja tenía dos hijos, ambos mayores de edad, y según las fuente, no constan antecedentes de violencia de género por parte del hombre, identificado como Javier B.F., que tenía licencia de arma para caza en regla.

Las primeras conclusiones de la investigación indican que el hombre habría utilizado una de sus escopetas para asesinar a su esposa y, posteriormente, la misma para dispararse un tiro en la cabeza.

El crimen ha suscitado gran conmoción entre los vecinos del lugar de Bronllo-Setecoros, donde residía la pareja fallecida.

Con este nuevo caso, son ya 12 las mujeres que han sido asesinadas en España a manos de sus parejas o exparejas desde principios de año, y el primero de violencia de género en Galicia en 2019.