La UB Conquense no termina de arrancar en este inicio de año, pero lo que mal empieza, también puede acabar bien. Los pupilos de Manolo Martínez atraviesan el momento más delicado de la temporada. No han conseguido ganar en las dos últimas jornadas disputadas en las que han firmado dos derrotas consecutivas, precisamente las dos en casa.

Están sufriendo más de lo esperado después de encadenar una trayectoria muy buena en la recta final de la primera vuelta. Pero el comienzo de la segunda mitad de campeonato no está siendo el deseado. «Es verdad que tuvimos muy buena racha, pero parece que este año cuando vienen los buenos resultados vienen todos seguidos y cuando llegan los malos, igual», afirma el delantero Gabri Salazar.

Pero es cierto que esa buena marcha ha propiciado que esta mala racha no esté afectado mucho en la tabla y el equipo se mantenga en una posición cómoda. Sin embargo, la necesidad de volver a puntuar crece cada jornada, pero el equipo es consciente de ello. «Sabemos que somos capaces de volver a coger la racha ganadora y volvernos a colocar arriba», subraya Salazar.

Está claro que algo le ocurre al equipo que ha pasado de la euforia a la desconfianza en cuestión de semanas. El conjunto blanquinegro necesita corregir errores para afrontar con solvencia el resto de temporada. Hay recursos y plantilla, pero hay que cuidar los detalles y recuperar la fe en el grupo. 

Esta próxima jornada será determinante porque los conquenses visitan el campo del Illescas, rival directo en esta pelea por los puestos de play-off. Puntuar será vital para recuperar la confianza y calmar los ánimos. «Todos los partidos son importantes, pero claro, estos duelos directos ayudan también mucho a la moral anímica del equipo. Es decir, si ganamos este fin de semana pues, a parte de ser tres puntos, también es un apoyo para saber que podemos estar compitiendo contra los equipos de arriba», destaca el delantero blanquinegro.

El objetivo del equipo no es otro que finalizar la temporada en los puestos de play-off y luchar por ese soñado ascenso. Pero para ello, los chicos de Manolo Martínez tienen que hacerse fuertes en su casa y no dejar escapar los puntos. Hay que ganar muchos partidos y sumar de tres en tres, porque los puntos que se van ya no vuelven.

Y el Conquense ha dejado escapar seis puntos muy importantes, aunque es cierto que han merecido más. Primero ante el Quintanar del Rey y después ante el Villacañas, en la última jornada disputada. 

Dos derrotas que han dejado al equipo tocado, sobre todo esta última. «Estamos muy dolidos porque es una derrota en casa. Veníamos de perder otro partido y consideramos que es un poco injusta porque hicimos muchas cosas bien para ganar», confiesa el futbolista. 

La Balompédica supo sufrir y tuvo ocasiones, pero sin embargo, las ansias de ganar llevaron a la precipitación. «Después de haber hecho tantas cosas bien y generar ocasiones, nos precipitamos en los minutos finales y hubo muchas pérdidas», resalta Gabri, al mismo tiempo que añade que el equipo no supo «manejar los sentimientos cuando íbamos perdiendo y querer ganar el partido antes de emplatarlo».