Formación, integración y sensibilización van de la mano en el proyecto de Mares Circulares de la Fundación Coca-Cola, que  en su cuarta edición ha llegado a Castilla-La Mancha con la actividad que se desarrolló el viernes en Tarancón. Más de 120 personas participaron en una recogida selectiva de residuos junto al río Riánsares, a su paso por la pradera de la ermita de la patrona, en la que se lograron retirar 58 kilos de basura. 

Con el apoyo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación,  esta iniciativa pone en valor la economía circular. «Con el propósito de retirar residuos realizamos una tarea de sensibilización y formación y lo más importante, de dar valor al residuo, ya que no solamente no debe estar en el medio natural porque contamina sino que con él se pueden hacer cosas», como las gorras y bolsas que se repartieron en esta jornada al aire libre, explican desde la organización. Junto a voluntarios corporativos y de la empresa local colaboradora, Vitasa, participaron miembros del Ayuntamiento, de las asociaciones de salud mental Nueva Luz y el Centro Ocupacional. 

caminos de agua. Tarancón es una de las más de 650 entidades que se ha unido a Mares Circulares desde que arrancó en 2008. Una apuesta por el fomento de la cultura medioambiental que se ha unido con el proyecto Caminos de Agua de Castilla-La Mancha, que coincidiendo con el centenario de la declaración de la ciudad ha creado un itinerario a lo largo del río Riánsares. Por lo que, junto con el contacto con la naturaleza, la propuesta se completó durante el fin de semana con actividades de promoción del patrimonio, la historia y la gastronomía local. 

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