Según datos oficiales del Ministerio de Derechos Sociales, hasta octubre de este año, 47.201 personas fallecieron en las listas de espera de la dependencia en España, según han destacado hoy en un comunicado la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales. En el caso de Castilla-La Mancha, la cifra roza los 1.600.
En concreto fueron 1.585, de los cuales 500 estaban pendientes de valorar, mientras que otros 885 se encontraban en lo que se denomina ‘limbo de la dependencia’, es decir que estaban valorados, pero esperando alguna prestación por parte del sistema de Dependencia.
El informe señala que la tasa de dependientes fallecidos en residencia fue de 199,4 por cada 1.000. Castilla-La Mancha la supera, pues es la segunda más elevada del país, con 261. El 27% de las personas dependientes beneficiarias fallecidas en este año vivían en una residencia. En Castila-La Mancha el porcentaje es mayor, llegando al 36,7%. «El impacto del Covid -19 en el Sistema de atención a la Dependencia ha sido catastrófico, retrocediendo en los indicadores importantes y generando mucho dolor, sufrimiento y muerte a miles de personas», subraya el informe.