El duende de la Navidad

R.L.C.
-

El taranconero Jesús P. del Saz forma parte del equipo de diseño de uno de los árboles más fotografiados en esta época del año.

Jesús P. del Saz posa para ‘La Tribuna’ delante de la fachada del hotel Four Seasons de Madrid. - Foto: JPS

Conocer el trasfondo de la Navidad y los duendes que contribuyen a que cada detalle sea especial para niños y mayores hace vivir estas fechas con la mayor intensidad posible. Para el taranconero Jesús P. del Saz, experto en comunicación audiovisual, producción y diseño, esta época es la más bonita del año.

Por segundo año consecutivo ha podido cumplir uno de sus deseos de niño, pues desde su infancia el mejor regalo que podían hacerle eran luces de Navidad, para lo que incluso ahorraba como podía desde muy temprana. Ahora, a sus treinta años, y como profesional del sector, confiesa que «la satisfacción que me produce es enorme, deja de ser un trabajo, para convertirse en una ilusión».  Y es que, igual que la Navidad pasada, ha vuelto a formar parte del equipo de diseño de Producciones Light Project, empresa madrileña encargada de la decoración del árbol de Navidad del lujoso hotel Four Seasons de Madrid, uno de los más fotografiados en estas fechas. «Ya el año pasado fue muy emocionante cuando se hizo una imagen tan viral, y eso que estaba la pandemia menos controlada, esta Navidad es visita ineludible aún más, se ha convertido en el nuevo Cortilandia», comenta. Con más de 5.000 bolas, de dimensiones de entre 20 y 50 centímetros, y 23 metros de altura, con abeto natural en la parte inferior y sintético en la superior, para este conquense el secreto de su atractivo es, por un lado, la ubicación, pues está en la calle Sevilla, junto a la plaza Canalejas, en el principio de la calle Alcalá, cerca de la Puerta del Sol, que es paso obligado para los millones de personas que acuden a la capital española a disfrutar de la Navidad. De otra parte, cree que la decoración en sí es lo que atrae a tanta gente, pues es «de un estilo distinto, nada habitual en España, donde no es común que un hotel decore su fachada y menos de esta forma, esto viene importado de Canadá, donde nace este hotel y esta idea», detalla. Las principales dificultades, que el montaje se realiza en tiempo récord de menos de una semana debido a estar en una zona tan céntrica, y que la estructura diseñada para soportar todo el árbol en sí, además de aguantar cualquier tipo de inclemencia meteorológica, no puede anclarse directamente a la fachada, al estar protegida por Patrimonio. El andamiaje de hierro interno de este árbol de Navidad simboliza todo el enjambre que hay detrás de él, el trasfondo que existe detrás de los muchos aspectos que rodean la Navidad, o la vida en general, y en los que merece indagar para entenderla mejor. Y al detenerse en estas fechas, para Jesús P. del Saz, uno de los elementos que no puede faltar, también por su simbolismo cristiano, es la luz, aunque tiene claro que  lo que debe primar es que «cada uno monte su árbol o decore su escaparate a su gusto».

Belenista de cuna  -desde hace tres años es miembro de la junta directiva de la asociación de belenistas La Hoguera de Tarancón-, ha vuelto a sorprender a paisanos y visitantes con el diorama que ha montado en un escaparate en plena calle Zapatería (en la antigua tienda de Críos). «Es para verlo al detalle, de cerca, he trabajado técnicas nuevas que ya se vieron en los dioramas de Semana Santa, ha sido una labor muy minuciosa», confiesa. Y por si fuera poco, también en estas fechas ha estado al frente de la coordinación técnica -con Samu Morales y A la Carta Cinema- de la retransmisión en directo de las fiestas de El Vítor de Horcajo de Santiago, de Interés Turístico Regional, con todos los hándicap que conlleva la pandemia. Ahora está trabajando, de la mano con Sergio Cantarero, en un documental y obra de teatro, Retratos de un pueblo, enmarcada en el centenario de su ciudad, que analiza cómo ha cambiado Tarancón a través de los ojos del pintor local Emiliano Lozano. 

Su curiosidad desde niño por todo, su inquietud y amor por ayudar, su pasión por sus raíces y las tradiciones, su formación continúa desde que empezó muy joven a trabajar como cámara en la antigua TV Tarancón, han llevado a Del Saz ha protagonizar el trasfondo de numerosos proyectos -como las exitosas Noches al Perol- que están marcado un antes y un después en la cultura, más allá de las fronteras de su localidad. Y ahora en esta época del año, es uno de los duendes de Navidad que no suelen dejarse entrevistar, sobre todo por su humildad extrema, pero a los que es necesario alabar de cuando en cuando. «Esto es una rueda, es verdad que las cosas no se hacen solas, pero también es cierto que recibo mucho», confiesa desde el belén de su casa.