Los únicos ganadores son las asociaciones que reciben el donativo, las hermandades que participan y arriman el hombro y la comunidad semanasantera en su conjunto». De esta forma tan sencilla y acertada resume Paula Vicente –una de las personas que integran la organización del Torneo Nazareno Solidario–, el leitmotiv de este campeonato, que un año más fue todo un éxito.

El torneo, que ya ha alcanzado su quinta edición, mantuvo el listón con respecto al año pasado, tanto en participación, –18 hermandades, solo una menos que en 2018– como en la cantidad de dinero recaudada. Y es que durante los últimos días han distribuido en tres entidades de la ciudad los 2.700 euros que han conseguido, en tres partidas exactamente iguales de 900 euros. Los beneficiados han sido Cruz Roja, la Asociación Española Contra el Cáncer y Duchenne Parent Project, una asociación que lucha contra la distrofia muscular.

En este sentido, hay que destacar que ha resultado fundamental para conseguir dicha cantidad la muy buena disposición del Ayuntamiento, que ofreció el campo de fútbol Joaquín Caparrós a un coste muy bajo durante el fin de semana en el que tuvo lugar el torneo (29-30 de junio). De esta forma, a diferencia de otros años, la cuantía de gastos se ha visto notablemente reducida, por lo que el balance ha sido «tremendamente satisfactorio».

«No podemos estar más contentos», recalca Paula. «Es la quinta edición del torneo y vemos que cada año está más consolidado que el anterior». Gracias al granito de arena de los 250 jugadores de este año, que contribuyeron con el coste de su inscripción, «tres entidades sin ánimo de lucro de la ciudad tiene algo más de recursos económicos para desempeñar la encomiable tarea que desempeñan».

Equipos nazarenos. Las hermandades participantes en el quinto Torneo Nazareno Solidario fueron La Borriquilla, Nuestra Señora de la Esperanza, La Santa Cena, La Oración en el Huerto de San Esteban, El Prendimiento, La Negación de San Pedro, La Amargura, La Archicofradía de Paz y Caridad, La Oración en el Huerto de San Antón, El Amarrado, La Soledad de San Antón, La Exaltación, El Santísimo Cristo de la Agonía, El Santísimo Cristo de la Luz, El Descendimiento y El Resucitado. Además de las propias hermandades, participó un equipo de la Banda de Trompetas y Tambores de la Junta de Cofradías.