Carlos Martínez y la Feria y Fiestas de San Julián 2019 han hecho historia. Por primera vez, una persona con Síndrome de Down pregona una de las celebraciones más importantes de la ciudad. Y lo hizo, además, a las mil maravillas demostrando que lo de romper barreras va con su forma de ser. El pistoletazo de salida a estos diez días de fiesta no pudo ser mejor. Cientos de conquenses abarrotaron el Parque de San Julián para escuchar un pregón en el que hubo poesía, humor, recuerdos, vivencias y un sentimiento de amor por Cuenca y por San Julián más que destacable.

«Lo importante de mi presencia aquí no es que tenga un cromosoma más; lo realmente importante es que pese a eso, puedo ponerme detrás de este atril, y ¡bendito atril!». Del maravilloso pregón de Carlos Martínez, ésta, sin ninguna duda, fue la frase que mejor fundamenta el histórico pregonero con el que ha contado San Julián 2019.

El acto, que fue presentado notablemente por el cronista oficial de la ciudad, Miguel Romero, sirvió además para que el alcalde, Darío Dolz, se dirigiera a los conquenses. El regidor aprovechó la ocasión para felicitar las fiestas a todos los asistentes, así como para invitarles a vivirlas de forma intensa y a disfrutar de las muchas posibilidades que ofrece la programación.

Asimismo, se llevó a cabo la imposición de bandas a las once damas de los diferentes barrios y pedanías que conforman la Corte de Honor. Y, de la misma manera, se entregaron los Premios Ciudad de Cuenca a los tres galardonados: Jennifer Morter, por su labor empresarial, Estival Cuenca –dirigido por Marco Antonio de la Ossa– por su labor cultural; y la Sección Especial del Club Natación Cuenca por su labor social, cuyo presidente es David Ocaña. La guinda perfecta al acto fue la actuación del cantante de copla, Sergio Albir.