Las academias de enseñanza no reglada, escuelas de baile, canto, pintura, música e idiomas, entre otras, «continúan padeciendo restricciones que están llevando a la desesperación a miles detrabajadores autónomos, que no han podido reiniciar con normalidad sus actividades desde el pasado 14 de marzo y, además, tampoco pueden realizar convenios de actividades extraescolares con centros de enseñanza reglada», según denuncia la organización UPTA. A juicio de esta agrupación de autónomos, «es vital que se ponga en marcha un mecanismo urgente de rescate, como el cese de actividad extraordinario, con el que los profesionales de la educación, cultura, ocio y tiempo libre puedan tener unos ingresos mínimos, y no seamos testigos de cómo desaparecen de nuestras calles centros privados de formación, ante la situación de incertidumbre y desconfianza que se está generando en el consumidor»