El Gobierno de Castilla-La Mancha destina actualmente más de 22 millones de euros en la mejora y conservación de los recursos turísticos de la región, una inversión que permitirá acometer 133 proyectos una vez finalizada la convocatoria de Expresiones de Interés.

La consejera de Igualdad y portavoz del Ejecutivo autonómico, Blanca Fernández, ha indicado que el impulso a las zonas rurales de la región pasa ineludiblemente por la apuesta por el turismo y sus sectores afines, como pueden ser la hostelería, el comercio, el ocio y la gastronomía. Así lo ha puesto de manifiesto Blanca Fernández en la inauguración del área de descanso de autocaravanas de la localidad ciudadrealeña de Argamasilla de Alba

La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha ha apuntado que la «gran aceptación» que ha tenido esta convocatoria de Expresiones de Interés por parte de las entidades locales se ve reflejada en el gran número de proyectos presentados, «que son el principio de lo que seguiremos haciendo porque la inversión en turismo genera economía, empleo y posibilidades de desarrollo».

Para Fernández, «estos proyectos son el reflejo de la voluntad decidida del Ejecutivo de Emiliano García-Page por favorecer la valoración de nuestros recursos turísticos como motor de desarrollo socioeconómico, al tiempo que deben servir de apoyo e impulso a las zonas rurales» con el fin de hacer frente al reto demográfico.

Turismo de calidad y seguro. La consejera ha reivindicado el papel del turismo rural en la estrategia para el desarrollo del turismo, y ha explicado que, aunque la crisis sanitaria ha obligado a ralentizar las políticas de crecimiento del sector para tratar de amortiguar el impacto de la pandemia en el mismo, no ha impedido que la región siga adelante con proyectos destinados a potenciar y ampliar su oferta turística con el fin de encarar la recuperación en la mejor posición y lo antes posible.

«Turismo, economía, riqueza y sostenibilidad. Eso es estratégico para los próximos tiempos en Castilla-La Mancha, de hecho, en esta Semana Santa a pesar de la perimetración y de la situación pandémica hemos tenido una ocupación de los alojamientos rurales de un 80%. Se trata de un dato muy relevante porque aquí estamos ofreciendo no solamente un turismo de calidad sino un turismo seguro y eso en los tiempos que corren es imprescindible», ha apuntado la consejera.

Además, cabe decir que en 2020 Castilla-La Mancha fue una de las comunidades autónomas con mayor demanda de turismo rural, en concreto se situó al término del año pasado entre las cinco primeras.