Según la portavoz del Ejecutivo castellano-manchego y consejera de Igualdad, Blanca Fernández, «el sistema sanitario puede responder aunque no sin tensión, sufrimiento y sacrificio por parte de los profesionales sanitarios que están haciendo muchas veces un esfuerzo sobrehumano».

En este punto, aseveró que «hay datos para pensar que podemos albergar cierta esperanza», sobre todo porque «se han producido ya más altas por curación en algunos hospitales que ingresos» de enfermos con coronavirus, una tendencia que confió se extienda a los próximos días.

De hecho, en relación a la evolución de Urgencias, dijo que hace una semana la mitad de las personas que acudían tenía que ser ingresada con sintomatología, pero que hace 48 horas ese porcentaje ha bajado 11 puntos hasta el 39 por ciento y en las últimas 24 horas al 36%.

No obstante, reconoció que los hospitales sufren «mucha tensión» y ésta tiene que ver con que las estancias medias se han multiplicado, por cuatro en planta -se ha pasado de una media de entre 6 y 7 días a 23- y por tres en las UCI.

En cuanto a la transparencia de las cifras, la portavoz del Gobierno regional matizó que el hecho de que a una persona con coronavirus se le dé el alta no significa que desaparezca de las estadísticas porque sigue contabilizada como caso positivo.