La Unión Balompédica Conquense no pudo arrancar la temporada regular sumando en su casillero. El rival, el CD Quintanar del Rey, demostró que es uno de los principales candidatos para liderar la clasificación y llevarse un campeonato que se antoja igualado y apasionante. 

La calidad de la plantilla verdiblanca se impuso finalmente a un equipo en ciernes que promete dar más de sí y ponérselo más difícil a sus rivales. Y es que el conjunto que entrena Manolo Martínez, consciente del peligro del rival, no se vino atrás desde los primeros compases del encuentro. Todo lo contrario. Tuvo opciones a lo largo del partido para haberse llevado, incluso, un empate.

De hecho, el marcador se abrió justo cuando acababa la primera mitad de partido. Un centro desde la banda derecha fue rematado espléndidamente por el atacante Gabriel Salazar, que no dejó que el balón llegara al suelo y empujó con la testa al fondo de las redes. En la segunda parte vendrían los goles de Collado y Megías, que daban la vuelta al encuentro y suponían la primera derrota visitante. 

El madrileño Salazar reconoce que el Quintanar «es un equipo muy fuerte y el campo es muy complicado. Ellos están acostumbrados a esos botes extraños que daba la pelota», pero considera que el Conquense «tiene un gran equipo. El entrenador nos propone un fútbol de ataque y creo que vamos a ser uno de los equipos referencia de la categoría».

Hay que tener en cuenta que el Quintanar del Rey es un equipo rodado, bajo los métodos del técnico Carlos Gómez, y el proyecto de Martínez no ha hecho más que empezar. De hecho, el atacante entiende que «somos un equipo con mucha gente joven y creemos que con el paso del tiempo nos iremos entendiendo todos mejor». Prueba de ello fue el centro medido que no desaprovechó para rematar y conseguir su primer tanto en el campeonato. 

sin dudarlo. «Un delantero que tiene mucha movilidad en la zona de ataque, que se asocia bien con los compañeros, que cae a banda y que puede estar en zona de remate», así se define el propio Gabri, quien dice sentirse cómodo con el fútbol que plantea el míster y está contento de la oportunidad que tiene en la Balompédica, tras haber pasado por equipos como el Burgos CF, el Navalcarnero, Leganés B, Amorebieta, Villanovense o Lealtad. «En cuanto me contactó el Conquense no lo dudé. Es un gran sitio, un equipo que se merece estar en otra categoría», comenta el delantero, cuyo reto «no es una cifra de goles. Llegarán cuando tengan que llegar, pero si que nos marcamos un objetivo que es el de ganar los máximos partidos posibles para intentar ascender».

No ha empezado la temporada como se querría, pero el atacante entiende que lo mejor del equipo está «por llegar. Poco a poco iremos a más y con el equipo que tenemos debemos estar arriba».